X Jornadas OPTIMA LAB: a velocidad de curvatura

Recién llegado del Euroforum que ya es sinónimo de Jornadas OPTIMA LAB, y al mismo tiempo de aprendizaje y diversión, he decidido sobreponerme al cansancio y voy a aprovechar la adrenalina que aún circula por mis venas para escribir la crónica de lo que ha pasado estos ultimos días, 11, 12 y 13 de enero.

Honestamente, en el AVE de ida, me sentía un poco triste, eran unas jornadas en las que no vería a los amigos AJ, Jero y Jesús. Aún «sólo» habiendo compartido un año de vivencias en la red con ellos, sabía que los echaría en falta. Pero como dijo William Shakespeare «El destino es el que baraja las cartas, pero nosotros somos los que jugamos».

Hace exactamente un año de mis primeras jornadas. «Sólo» un año. Cuando miro atrás me da un poco de vértigo. En estos 365 días, y como aquel que dice, en mis ratos libres, he llenado mi mochila con el Practitioner en PNL, la Certificación como Trainer en GTD y estoy a un fin de semana de terminar el programa de formación en Coaching (ACTP). Casi nada. Es por eso que he titulado el post «a velocidad de curvatura». Porque además de ser fan de Star Trek, es exactamente la sensación que tengo. Según la Wikipedia, la velocidad de curvatura es un tipo de propulsión que se basa en curvar o distorsionar el espacio-tiempo, de tal manera que permita a la nave acercarse al punto de destino. Pues exactamente lo siento como eso

Y esta sensación no la tengo tan solo a nivel personal, creo que la puedo hacer extensiva a toda la red, hay indicadores que así lo muestran y que José Miguel Bolívar ya introducía en su balance anual. OPTIMA LAB es como el USS Enterprise. Una maquina con un innovador motor de curvatura, preparada y dispuesta a explorar nuevos mundos y abrir camino hacia ellos.

Buena parte de las jornadas las hemos dedicado al mantenimiento y puesta a punto de esta maquinaria. Afinar procedimientos, avanzar en los distintos proyectos en marcha y abrir de nuevos.

Pero también hemos dedicado dos tardes enteras a formación, otro tipo de mantenimiento extraordinariamente necesario, ya que debemos seguir mejorando nuestras competencias para ofrecer siempre lo mejor de lo mejor. Me refiero a la excelencia que ya os contaba en la crónica de las jornadas de verano.

Invitamos a dos autenticos cracks, Mónica Galán y David Barreda. Si digo que además de aprender, disfrutamos como nunca, me quedo corto. Para resumirlo, con ellos trabajamos como hacer que los alumnos de nuestras formaciones vivieran experiencias de aprendizaje únicas. Pero además de lo interesante de la formación, quiero destacar otro aprendizaje que personalmente me llevé: la claridad, ilusión, energía y potencia que transmiten las personas que han logrado alinearse con su propósito vital. Las dos son un claro ejemplo de ello. Francamente, quedé muy impresionado.

Eso es lo que dieron los tres días de jornadas junto a José Miguel, Paz, David y Cruz. Os invito a leer sus vivencias de estos días, para apreciar esa diversidad tan enriquecedora de la que se nutre la red OPTIMA LAB.   

«El destino favorece a los niños, a los locos y a las naves llamadas Enterprise» Comandante William T. Riker, en Star Trek-The Next Generation