Este año tocaba para mí sesión única en Béjar, así que allí nos presentamos unos cuantos menos de lo acostumbrado, aunque a fin de cuentas no importa porque siempre te encuentras viejos amigos que saludar o completos desconocidos con los de comentar el evento, aunque sea esperando en la cola del urinario portátil. Además, tenía que curtir la cámara y objetivo nuevos con una buena tunda de cera fotográfica, para lo cual Béjar no es mal lugar.Abría la noche la impresionante dama negra Sharrie Williams, que apareció en escena toda vestida de azul: Dressed in blue to sing the blues, comentó de manera acertada. Como me ha ocurrido tantas veces al llegar a Béjar, no conocía nada de esta señora, pero no fue problema porque mientras saludaba a Óscar, de la Cueva del Jazz de Zamora, me comentó que había estado tocando allí hacía ya quince años y era una pasada. Y así fue, una pedazo de artista y un pedazo de trío que la arropaba dando un espectáculo tremendo que dejó la Plaza de Toros del Castañar bien calentita para el segundo plato de la noche y razón principal de mi visita anual, el ilustre y mitico Eric Burdon.
Gracias a Thundercosme que este año se curró los videos jugándose el pellejo con los de seguridad, ya que el Señor DGM está viviendo la aventura checa (un saludo desde aquí)