El J-Pop también ha tenido su hueco en esta edición del Salón del manga de Barcelona.
El J-Pop, una abreviación de “pop japonés”, es un género musical dentro de la cultura musical en Japón en la década de los 90.
Tiene sus raíces en la música tradicional, pero especialmente en la música popular de los sesenta y la música rock, como los Beatles y los Beach Boys. A finales de los setenta fue definido por grupos de new age y reemplazó el término Kayōkyoku (música pop japonesa hasta entonces).
El término fue creado por los medios japoneses para distinguir la música pop japonesa del resto y se refiere únicamente al pop hecho dentro de Japón.
En la exposición “Los ritmos del J-Pop” se podía ver los orígenes de las bandas más populares como Glay, Luna Sea y L’arc en ciel que se caracterizaron por pertenecer a la corriente del Visual Kei, dando mucha importancia al aspecto físico de los intérpretes, usando maquillaje y peinados extravagantes para proporcionarles una visión andrógina.
A partir del siglo XXI, el J-Pop se caracteriza por una mayor aproximación a la industria de la animación japonesa como el anison (canciones de anime), el único segmento que creció un 7%, gracias a la popularidad de animes como Ataque a los Titanes a pesar de la tendencia descendente del mercado.
Por otra parte, la exposición muestra lo especial que es el mercado japonés y que nada a contracorriente de la tendencia mundial que prefiere la música digital a costa del CD. El año pasado ningún otro país del mundo se gastó más en CDs que en Japón, según la Asociación de la Industria Discográfica de Japón. Los CDs representaron alrededor del 80 % de las ventas de productos musicales, un ratio muy superior al 34 % de Estados Unidos.
En la exposición se destacaba el caso de la blogger y cantante Kyary Pamyu Pamyu donde el video de su primer single, PONPONPON ha sido visto unos 70 millones de veces en YouTube.
Más de la mitad de sus visitantes proviene del extranjero, principalmente de América y de Europa. O cómo los artistas virtuales de J-Pop poco a poco están ya substituyendo a las cantantes de carne y hueso como el personaje del videojuego Hatsune Miku de Vocaloid, con la voz de Saki Fujita e influyendo incluso en la creación de Ona, la primera cantante virtual catalana.
La diferencia idiomática fue el principal obstáculo que tuvo que enfrentarse el J-Pop en los primeros tiempos pero hoy el contexto es muy distinto y los vientos soplan a favor de la nueva hornada de artistas japoneses. Al terminar de ver la exposición me entraron ganas de ver el concierto de “Loverin Tamburin”, que estaba programado ese mismo día. Un grupo de pop japonés que debutaron en la primavera del 2006, cuando lanzaron Aishitageru, el opening del anime Makaisenki-Disgaea. Gracias a este gran éxito, también interpretaron Mo•o!, el ending de la serie Nanatsuiro ☆drops. En el 2009 compusieron Mugen Fighter, la canción principal del equipo de béisbol Hiroshima Toyo Carp. A finales del 2011 Loverin Tamburin inició un programa de TV que introduce la cultura japonesa en Taiwán. En ese mismo año, realizan su primer concierto europeo en la ciudad de Toulouse coincidiendo con el Game Show. La vocalista del grupo es Aya que también compone y escribe sus propias canciones. Uno de sus últimos éxitos ha sido un cover de las canciones del famoso Studio Ghibli para la productora Pony Canyon en Japón y en Corea. Actualmente Loverin Tamburin está realizando una gira mundial por diversos países como Suiza, Italia, Marruecos, Alemania, Australia, Usa, Francia, Malasia y España. También son los embajadores del nuevo evento dedicado a la animación japonesa, el Haneda Internacional Anime Music Festival (HAF). Su web oficial es www.loverintamburin.com.Hacía tiempo que no iba de concierto, así que ni corto ni perezoso me dispuse a disfrutar, cantar y bailar.
Había oído pocas canciones de ese grupo, pero en directo se crecen y me gustaron mucho más. Si no los conocéis y os gusta este tipo de música, os los recomiendo.
Un hociquito japonés
P.D
Os dejo dos videos del concierto. Un paparazzi me pilló disfrutando del concierto.