El análisis de varias muestras de zumos de naranja de distintos bares y restaurantes arrojo como resultado que el 43% supera el límite de bacterias permitidas, detectándose varias familias de bacterias que representan riesgo para la salud humana, este es el resultado de un estudio realizado por investigadores Universitat de València. El estudio publicado por la revista Food Control indica que de una muestra de 190 lotes analizados el mayor índice de contaminación bacterial se detectó en aquellos jugos que permanecen en jarras metálicas, ya que más de un 81% estaba contaminado por enterobacterias, que están relacionadas a la fermentación y oxidación de los alimentos, esto afectaría su calidad nutricional; La Escherichia coli y la Salmonella, pertenecen a esta familia de bacterias y pueden provocar enfermedades gastrointestinales graves. La investigadora Isabel Sospedra explica que la principal solución para este tipo de contaminación es la correcta limpieza y desinfección de las máquinas expendedoras y de las jarras que almacenan el zumo para asegurar la salud de los consumidores. A su vez se detectó que un 12% excedía los límites de microorganismos aerobios mesófilos (aquellos que viven entre los 25 y 45 grados), que incluyen hongos y levaduras. Esta contaminación ocurre principalmente porque los exprimidores y jarras se mantienen en condiciones no adecuadas, lo que facilita la contaminación microbiana y esta es arrastrada al momento de la extracción del jugo. www.iberociencia.com Referencias bibliográfica: Sospedra I, Rubert JV, Mañes J, Soriano JM,. “Incidence of microorganism from fresh orange juice prcessed by squeezing machines”. Food Control. 23 (1) (2012), 282 – 285, Enero 2012 Posted in: Salud
Revista Salud y Bienestar
El análisis de varias muestras de zumos de naranja de distintos bares y restaurantes arrojo como resultado que el 43% supera el límite de bacterias permitidas, detectándose varias familias de bacterias que representan riesgo para la salud humana, este es el resultado de un estudio realizado por investigadores Universitat de València. El estudio publicado por la revista Food Control indica que de una muestra de 190 lotes analizados el mayor índice de contaminación bacterial se detectó en aquellos jugos que permanecen en jarras metálicas, ya que más de un 81% estaba contaminado por enterobacterias, que están relacionadas a la fermentación y oxidación de los alimentos, esto afectaría su calidad nutricional; La Escherichia coli y la Salmonella, pertenecen a esta familia de bacterias y pueden provocar enfermedades gastrointestinales graves. La investigadora Isabel Sospedra explica que la principal solución para este tipo de contaminación es la correcta limpieza y desinfección de las máquinas expendedoras y de las jarras que almacenan el zumo para asegurar la salud de los consumidores. A su vez se detectó que un 12% excedía los límites de microorganismos aerobios mesófilos (aquellos que viven entre los 25 y 45 grados), que incluyen hongos y levaduras. Esta contaminación ocurre principalmente porque los exprimidores y jarras se mantienen en condiciones no adecuadas, lo que facilita la contaminación microbiana y esta es arrastrada al momento de la extracción del jugo. www.iberociencia.com Referencias bibliográfica: Sospedra I, Rubert JV, Mañes J, Soriano JM,. “Incidence of microorganism from fresh orange juice prcessed by squeezing machines”. Food Control. 23 (1) (2012), 282 – 285, Enero 2012 Posted in: Salud