Ya se fué, me refiero al Papa, ese ser vicario de Dios en la tierra, ahora lo que nos toca es reflexionar acerca de todo lo acontecido en este movido fin de semana. Cual estrella de rock, atrajo a las ciudades de Santiago de Compostela y Barcelona a personas venidas desde todas las partes de nuestro planeta, aunque muchísimas menos de las esperadas por los organismos organizadores.
La visita nos ha dejado miles de instantáneas, pero sobre todo unos datos y opiniones preocupantes. No me estoy refiriendo a la pérdida de fe en la sociedad española, que para mi gusto deberían de caer aún más de lo que lo han hecho, sino de las opiniones vertidas por representantes políticos y por el mismo Benedicto XVI, y de los datos económicos derivados de esta visita.
La visita del Papa ha costado a las arcas públicas 13.333 euros al minutos unas cifras que, nunca mejor dicho, claman al cielo. Unas cifras que en una época como la que estamos pasando en este país suponen muchos días de trabajo de cualquier trabajador. Todo ello para que un señor, representante de una facción de la sociedad que desea el recorte de derechos sociales ya como puso sobre la mesa Mariano Rajoy la pasada semana, viaje por la geografía española para abrazar y arengar a una masa de ultraconservadores fanáticos, que niegan el matrimonio homosexual o creen que el aborto es un asesinato.
Pero eso no es todo…vayamos apretándonos el cinturón porque este ser inquietante y tenebroso, que más que ser el vicario de Dios parece sacado de Nosferatu, nos visitará el agosto del 2011 y su visita no rondará los 5 millones de euros, sino que alcanzará la friolera de los 30…una verguenza en tiempos como los que nos encontramos…
Por tanto solo mostrar mi rechazo ante esta visita y las futuras que tengan como motivo dar lecciones a la sociedad española sobre moralidad y buenas costumbres…sobre lo que debe ser y lo que no está bien.
No nos dejemos guiar como si fuéramos peleles por una iglesia que lo único que busca es extender su poder y aumentar sus beneficios en vez de ayudar a los que más lo necesitan…en 2000 años no les ha ido nada mal, Jesucristo nació en un pajar…
Benedicto, yo no te esperaba y no sabes cuánto me alegro de que te hayas ido…Haznos un favor, no vuelvas. Alza tu voz!!