Revista Cine
Y DIOS CREÓ A LA MUJER (Et Dieu créa la femme) (Francia, Italia; 1956) Drama, Costumbrista, Romántico
Publicado el 14 diciembre 2020 por Larrea200658Director: Roger Vadim --- Intérpretes Principales: Brigitte Bardot, Curd Jürgens, Jean-Louis Trintignant, Christian Marquand, Georges Poujouly, Jane Marken, Jean Tissier, Isabelle Corey, Jacqueline Ventura, Jacques Cirion, Paul Faivere, Jany Mourey, Philippe Grenier, Jean Lefebre, Marie Glory, André Toscano, Raoul Lévy --- Argumento: En St. Tropez, Juliette Hardy es una chica huérfana de dieciocho años, sexualmente muy precoz y activa. Eric carradine, un hombre rico y maduro, se siente muy atraído por ella. Pero ella está enamorada de Antoine Tardieu, un joven que trabaja en Toulon y es el hijo mayor de una familia humilde que posee un pequeño astillero. El problema es que Antoine sólo quiere tener una breve aventura con ella. Cuando los padres adoptivos de Juliette deciden, en vista de la mala reputación de la chica, que vuelva al orfanato, el hermano de Antoine, Michel Tardieu, le propone casarse, y ella acepta y comienza a amarlo. Pero cuando la familia Tardieu decide vender el astillero a Eric, Antoine vuelve a Saint-Tropez y renace la pasión de Juliette por él. --- Mi comentario: "- Voy a echar raíces" - Vendré a regarte".
Película coproducida entre Francia e Italia, que ha pasado a la historia del cine por ser el film que significó el mito erótico de Brigitte Bardot, que ya llevada varias películas, pero menos destacadas en cuanto a resaltar su magnética presencia, belleza y sensualidad. Según Carlos Aguilar, en su "Guía del Vídeo Cine" se trata de "una comedia más o menos imbécil", calificación que no la representa puesto que ni es una comedia ni es imbécil. En realidad no es más que un cuento romántico, lleno de sensualidad y morbo, pero en el fondo bastante puro aunque no casto.
A mí me ha gustado bastante. Y lo ha hecho por resultarme entretenida e interesante en todo momento. Amén de la arrebatadora presencia de B.B. tiene buenos diálogos, llenos de ironía y mordacidad, que finalizan las diversas escenas. Por su parte, la fotografía de Armand Thirard, que ensalza los preciosos paisajes en los que está rodado el film (Port de la Ponche, Saint-Tropez, Var, Francia) es realmente preciosa. Es una cinta de amor, que a ojos del espectador del siglo XXI puede parecerle bastante light y, sí, algo ingenua en el fondo, pero sigue conservando su encanto y es agradable de ver.