…y hasta ahora me doy cuenta!

… y hasta ahora me doy cuenta!

¿Que clase de “ingenuidad” se esta apoderando tan bruscamente de mi?

Todas esas pistas, todas esas indirectas y solo hasta ahora caigo en cuenta.

Debo admitir que no siempre fui el mejor en el amor y esas cosas del corazón,

Muchas veces he pensado que siemplemente no nací para eso, pero…

Por Dios! como no me había fijado! todo el tiempo estuviste allí, siempre presente,

en cada una de mis aventuras, en mis travesuras, en todos esos coloridos diciembres, en cada uno de mis logros!

Estuviste en las inolvidables derrotas en las que trataba de derrumbarme,

en las que la oscuridad me absorbía con descaro y sin censura.

… pero tú y solo tú me ayudaste y me diste fuerzas para continuar.

… y ahora… ahora te he dejado a un lado por alguien más.

Por alguien que elegí al azar, con ojos vendados y sin consultartelo antes a tí.

Ahora me doy cuenta que estas sufriendo, estas en declive.

… pero que cobarde he sido! no sabes lo mucho que lo lamento!

Quisiera remediarlo. Si! en verdad quisiera que me disculparas…

… no, mejor, mucho mejor… que me perdonaras.

Te escribo estas humildes letras que me brotan de lo más profundo de mi ser,

con el mayor de los anhelos de que tan solo la llegues a leer.

Si no deseas responder o siquiera echar un vistazo, lo entenderé,

pero si me respondes, si ves que estoy demasiado arrepentido,

te prometo que no volveré a olvidarme de tí, ni menos fallarte.

Siempre te pondre de primero, en el lugar que siempre debí haberte puesto.

Ahora entiendo que lo más dificil de perderte a tí mismo es volverte a encontrar.

… pero lo haré, me encontraré de nuevo, te recuperaré a tí de nuevo, a mi… a los dos.