Muchas veces he fantaseado viendo galas de premios sobre hipotéticas categorias dignas de ser premiadas. La que más veces me imagino es la de Mejor Trailer, ya que en muchas ocasiones películas de dudoso gusto han venido precedidas por adelantos que prometían un producto muchísimo mejor. Otra categoria soñada por mí sería la de Mejor Banda Sonora adaptada. Al igual que muchas veces libros o historias se adaptan para el cine y este esfuerzo se ve reconocido, no vería nada descabellado premiar esa transformación de músicas ya existentes parha contar mejor lo que estamos viendo en pantalla.
Aquí dejo una lista de algunas películas que podríanser ganadoras de esta posible categoria.
‘La naranja mecánica’ (Stanley Kubrick 1971)
Los años 70 supusieron la eclosión de los sintetizadores dentro de la música de masas (un claro ejemplo fueron Pink Floyd). En el mundo del cine no podía ser otro que Stanley Kubrick el que se diera cuenta del atractivo de estos nuevos sonidos artificiales. Para la ambientar ‘La naranja mecánica‘ encargó el trabajo a Walter Carlos, uno de los primeros y más famosos intérpretes de música electrónica (más adelante se cambiaría el sexo y se llamaría Wendy Carlos y haría bandas sonoras de películas como la ochentera ‘Tron‘). Todos los que han visto la película saben del gusto de Alex DeLarge por la música clásica y en especial por Beethoven, así que estas adaptaciones electronicas no podrían ser más que versiones bizarras y originales de piezas de Rossini o el propio Beethoven en clave de Moog.
‘Life Aquatic’ (Wes Anderson 2004)
De todos es sabido lo mucho que le gusta a Wes Anderson homenajear a artistas y canciones de los que es fan dentro de sus films. En su ‘Viaje a Darjeeling‘ por ejemplo decidió destacar temas de los Kinks por encima de otras bandas como The Rolling Stones. Pero si hablamos de un homenaje claro a un artista dentro de su filmografía deberíamos hablar del papel que juega David Bowie dentro de ‘Life Aquatic‘. Llega a tanto ese amor por Bowie que decide que el autor de las versiones, el brasileño Seu Jorge, sea un miembro más de la tripulación de Steve Zissou que nos acompaña en esta aventura a ritmo de bossa nova.
‘Yo soy Sam’ (Jessie Nelson 2001)
Como se dice en la película ‘Tropic Thunder‘, “si eres actor y haces de tonto solo te nominarán si eres un tonto con alguna habilidad“, y en este caso la destreza del protagonista de esta bonita y lacrimógena historia es conocer absolutamente todo de los Beatles (y sí, le valió la nominación a casi todos los premios a Sean Penn). Así que no se podría imaginar un acompañamiento mejor en la lucha por recuperar a Lucy (una aún inocente Dakota Fanning) que las canciones de la propia banda de Liverpool. Eso sí, en esta ocasión (muy probablemente por temas legales) no se utilizan grabaciones originales sino se opta por captar a artistas de la talla de Rufus Wainwright, Aimee Mann, Eddie Vedder o Nick Cave entre muchos otros para recrearlas.
‘Moulin Rouge’ (Baz Luhrmann 2001)
La gente que me conoce sabe de mi mala relación con esta película de Baz Luhrmann. Pero eso no quita para que pueda admirar el riesgo, e incluso aceptar como acierto, muchas de las cuestiones artísticas del film. Uno disfruta de esa amalgama de canciones de diferentes estilos chocando con la época en la que se cuenta la historia. La originalidad del Roxanne de The Police a ritmo de tango, el gran Beck recreandose en los Diamond Dogs de Bowie, el glam necesario para esta historia con Children of the revolution de T Rex o el guiño a la genial ‘Sonrisas y lagrimas‘. Una mezcla aparantemente disparatada que supone un punto a favor de la película.