Como todo, ésto también ha evolucionado y ahora tenemos un humor gráfico rejuvenecido que en nada desmerece a los clásicos pero que nos aporta una frescura contemporánea. Se han sumado al carro de la risa cotidiana muchas mujeres que reflejan la humanidad más sencilla en forma de chiste porque saben como pocas que no hay nada mejor que reírse de uno mismo. Es un ejercicio de honestidad con nuestro interior y además nos damos cuenta de que no somos los únicos a los que nos ocurren las cosas más inverosímiles, humillantes o inconfesables con las que nos avergonzaríamos si nos descubriesen. La nueva generación de narradoras de lo cotidiano en clave de humor son, entre otras:
Ana Oncina
¿Podrían enamorarse una croqueta y una empanadilla?
Ana Belén Rivero
LucíaBe
Lyona
Caroline Selmes
Raquel Córcoles
Agustina Guerrero
Las Rayadas
PORQUE NO HAY NADA MEJOR PARA LA SALUD QUE REÍR.