Revista En Femenino

¿Y para cuando el hermanito?

Por Clara Ingeniera @mamaingeniera

Aunque haya salido del armario de la infertilidad y haya dado la cara, aún existe la necesidad de la gente de conocer nuestros planes reproductivos. Y claro, ¿para cuando el hermanito? ya ha hecho su aparición estelar en nuestras vidas.

El caso es que si la persona en cuestión conoce nuestro problema, no tenemos ningún reparo en contarle nuestros planes. Y es que sí, tenemos planes.

buscar un embarazo

Es obvio que no podemos tener hijos de forma natural. Al menos hasta que no se demuestre lo contrario. Y la idea de tener dos hijos siempre rondó en nuestras cabezas. Yo tengo hermano, maridín tiene una hermana. Ambos sabemos que tener hermanos es lo más mejor del mundo mundial.

Cuando conocí a Bichito, me hice a la idea de que podía ocurrir que no pudiésemos tener más hijos y que debía vivir esta maternidad como si fuese la primera y la última. Así lo estoy haciendo, no obstante, casi de forma diaria me imagino con dos hijos (preguntándome si llegaría a todo) y se me encoge el corazón de pensar que es muy posible que no lo pueda cumplir.

¿Cuál es nuestro plan?

Para empezar es no usar ningún método anticonceptivo, porque ¿para qué?

Dejando a un lado que el sexo sigue siendo escaso por mis problemas de suelo pélvico, no veo necesidad de usar métodos anticonceptivos, ya que si me llega un hijo gratis, aunque no sea el momento “perfecto”, eso que nos ahorramos.

Pero soy consciente de que necesitaremos recurrir de nuevo a la ciencia, así que hemos empezado a ahorrar para ello en una cuenta separada. Porque sí, porque hace falta mucha pasta y yo me tendré que hacer nuevas pruebas, medicación, transfers, etc.

Todo eso suponiendo que mi nuevo análisis de AMH no diese unos resultados catastróficos, que también sé que podría ocurrir.

¿Cuándo se llevaría a cabo el plan?

Si hay algo que sé seguro, es que mientras dure el tratamiento, no lo contaré en vivo y en directo.

Ahora que me conoce más gente, querría volver a evitar el aluvión de preguntas que ya sabéis todas que se hacen. Y no solo eso, la incomodidad de las otras personas. Porque sí, la infertilidad genera muchas incomodidades.

El caso es que nos hemos planteado como fecha de inicio el próximo septiembre, es decir, en un año.

Inicio implica volver a la clínica a una primera visita, renovar pruebas, ver qué posibilidades tengo, etc. Por lo que un tratamiento nuevo quizás se pueda empezar en el 2018.

¿Y qué pasa si no lo conseguimos?

Para mí, el hecho de darle un hermanito a Bichito supera las barreras de la genética, y creo que si no pudiera darle un hermanito con mis propios óvulos, acudiría a la donación.

Aunque llegado el momento, es un proceso que tendría que madurar y tratar con mucho mimo, ya que uno no está preparado para ello hasta que no le toca. Pero me voy preparando, y haciéndome a la idea de que puede ocurrir.

Ovodonación o adopción de embriones son las opciones que barajo. Y hablo por mí porque de esto no he hablado con maridín, ya se verá. Pero la verdad es que me da absolutamente igual la genética que tenga, porque amor va a tener mucho.

¿Cuando decidisteis afrontar un segundo tratamiento de reproducción asistida? ¿Os llevasteis alguna sorpresa? ¿Lo conseguisteis o tuvisteis que recurrir a donación?


Volver a la Portada de Logo Paperblog