Durante todo este tiempo he visto pasar por delante bastante tendencias, yo soy una mujer sencilla de las que no le gusta arriesgar en muchos casos porque luego se necesita tiempo y originalidad para hacerlo bien y, una servidora no derrocha de una cosa ni de la otra.
La silla Acapulco era de esas piezas de diseño, esos iconos de la decoración que no me decía NI FU, NI FA NI FAROLILLOS, la veía pasar por delante mío y bueno... es mona... pero no me dice nada!
Pero el domingo 5 de julio del 2015... yo que me fui a comer con unas amigas a una terraza de Valencia, podéis ver el momento inmortalizado en esta foto (clic aquí) y ellas me hacían ojitos has ta que me senté Y MADRE DEL AMOR HERMOSO... ¿PERO ESTA MARAVILLA QUÉ ES? fue amor a primera vista, te atrapa, te recoge las asitas del amor, la espalda y te aguanta la cabeza mientras susurra... "relájate que yo hago el resto del trabajo" y para no resistirse tanto, que quiero una y al final caerá!
Y como me vine tan concienciada con mi nuevo descubrimiento, ya se que tiene mas años que Matusalén pero yo, no lo sabía!!! me he puesto a buscar inspiración para encontrarle un sitio en casa, en el pueblo o donde sea pero ese placer lo tengo que experimentar más a menudo y gracias Instagram una chica me recomendó esta tienda (clic), donde tenéis la blanca o amarilla por menos de 70€ (PERDICIÓN) ¿no os ha pasado probar algo y decir... es una experiencia religiosa?
¿Os gusta la Silla Acapulco?¿Os habéis sentado en alguna?
Fotos aquí, aquí, aquí, aquí, aquí, aquí, aquí, aqui