Pues esa es la historia...
A primerosde Junio, época de cerezas por aquí, me regalaron un buen puñado de ellas: rojas y relucientes.
Como ya saben ustedes que yo me inspiro hasta con el choped de oferta de la charcutería, me dije...¿porqué no hacer una francesita con un detalle de cerezas?
Y a ello me puse. La verdad es que me gustó, quedó mona.
...pero claro, ya saben también que uno de mis mayores defectos, a veces, es no saber parar a tiempo...
Así que decidí montar un look que fuese con esa manicura cerecil. Era fácil...
Los ojos irían en un neutro de toda la vida, marcados pero sin dar demasiado aspecto de cargados...
Ya que tenía la paleta mate de Sleek, podría aprovechar los tonos más neutros de la Darks para ver qué tal iban. Y la verdad es que se trabajan muy bien.
Para iluminar el lagrimal usé la Pillow Talk (blanca), para el resto del párpado móvil la Flesh (color carne) y en el pliegue tienen la marrón chocolate, denominada, Paper Bag.
También aproveché la Dune, de un tono carne algo más claro, para iluminar el arco de la ceja. Como son tonos mates queda la mar de natural.
Finalmente, decidí comprobar como se comportaba en mojado: El delineado está hecho con la sombra negra en mojado, llamada Noir.
Máscara y listas.
Y claro, si quería ir a juego y seguir con mi paranoia de las cerezas, había que tirar de un buen rouge.
El que llevo es mi amado Russian Red, que es precisamente un tono cereza intenso, pero además lleva un toque de gloss de Sephora, también rojo.
El colorete es el melocotón de Misslyn, que queda natural y favorecedor en cualquier momento del año.
Amantes de los neutros: TAMBIÉN necesitan la Darks ...muajajaja
Y, ya que estaba, ¿porqué no añadir un toque a mi vestuario en rojo cereza?
¡¡¡Jajaja!!!
BESOS!!