Revista Educación

¿y tú quién eres?

Por Nebula
Estoy echando un vistazo a la mil imágenes que a diario podemos encontrar de madres con sus bebés. Anuncios de madres sonrientes, absolutamente enamoradas de sus hijos, mostrando un amor incondicional e inmediato por ellos.

He oído miles de veces cosas como estas: "Nada más nacer, con sólo verlo, lo quise", "Me enamoré de él cuando supe que estaba embarazada", "El instinto maternal surge de inmediato, cuando te lo ponen en los brazos"



Pero, ¿es esa la realidad?, ¿todas las madres sienten de inmediato ese amor?¿Y TÚ QUIÉN ERES?¿Y si no es así? 
El sentimiento de culpabilidad es terrible: "¡Soy una mala madre, un monstruo horrible!"

Nada más lejos de la realidad
La maternidad es un momento de cambio, una crisis vital, una transición donde nuestra vida cambia, todo es nuevo. Desconocemos cuál es nuestro papel, cómo debemos de actuar y nos dejamos llevar por aquello que se espera de nosotras, por esa imagen de madre enamorada de su hijo que nos han grabado a fuego a lo largo de la historia.Pero ¿por qué tenemos que saber, de repente, con sólo chasquear los dedos, cómo ser madres?Has gestado a ese hijo, lo has soñado, imaginado miles de veces, pero ahora que lo tienes en tus brazos, que lo acunas y miras sin cesar, te das cuenta que es un absoluto desconocido para ti. Ese niño que habitaba en tu mente, ahora es real, está aquí y no sabes quién es, aún no lo conoces. "¿Cómo lo voy a querer, si no sé quién es?"El vínculo que se forma entre una madre y su hijo es un proceso relacional que necesita tiempo. Tiempo que dependerá de cada persona, porque cada uno es él y sus circunstancias propias. No existen guías, ni verdades absolutas, tan sólo cuenta el proceso individual de cada uno.Olvídate, pues, de los dichos, de la sabiduría popular, de "lo que debería ser". Rechaza los sentimientos de culpa y disfruta del proceso de conocer a ese niño, permítete crear esa relación, poco a poco, con calma, con paciencia. Y sobre todo, escuchándote a ti misma, creando y formando ese nuevo rol que es ser madre. Reconociendo tus propios sentimientos y disfrutándolos al máximo.Permítete el tiempo que necesites para conocer y querer a tu hijo.


¿Y TÚ QUIÉN ERES?

Volver a la Portada de Logo Paperblog

Revistas