Revista Espiritualidad
Dicen que todo es cuestión de actitud.Dicen que El dolor es inevitable, pero que el sufrimiento es opcional.Dicen que lo que no nos mata, nos hace más fuerte.Pero nadie dice lo horrorosisisisimo que es volver después de las vacaciones. Lo duro que se hace, lo rápido que se pasa, lo bien que se está por el mundo y lo duro que es volver al trabajo y a la supuesta rutina. Rutina, para mí, esa gran desconocida.Algunos dicen que la vida es una mentira, desde luego lo de las vacaciones, de ser así, son una mentira muy, muy cortita. Cuanto tardan en llegar y que pronto se acaban.Como decían los versos de Pablo Neruda: " Es tan corto el amor, y es tan largo el olvido". Aplicado a las vacaciones se va a convertir en un auténtico axioma.Se acercan las vacaciones y acaricias los planes y las actividades que vas a hacer en esos días de descanso. Pasan y ni has descansado tanto, ni has podido dibujar, leer y hacer todo lo que pretendías. Está claro que algo lees, yo he podido terminar el libro de Paul Aster, "El palacio de la luna", que ha sido sin duda una interesante lectura, pero me hubiera gustado acabarme al menos dos libros más. He dibujado, bastante, pero no los he acuarelado, se han quedado sólo en la tinta, y tampoco tantos como me hubiera gustado. Eso sí, he practicado paddle surf, que le tenía ganas, pero mucho menos tiempo del que me hubiera gustado. También es cierto que disfrutado de paisajes geniales, gastronomía maravillosa, noches increíbles y playas acogedoras y entrañables, pero todo, la mitad de la mitad de lo que me hubiera gustado.Vuelven los madrugones, los días de trabajo, que por mucho que nos pueda llegar a gustar, no olvidemos que nos pagan por ello, y eso implica, inherentemente que muy divertido y agradable no puede ser. No he tenido, sin embargo, la sensación que he tenido en otras ocasiones, que estaba en un sitio diferente del que me gustaría en realidad y viceversa, creo recordar que ya me pasó el verano pasado y eso da que pensar.En breve la vuelta al cole, y ese ejercicio de pensar y planificar. El volvernos a marcar metas y rutinas para alcanzarlas, volver a tener retos, cosas que nos espoleen, que nos motiven en el día a día, que nos exijan esfuerzo, voluntad, coraje.Yo ya tengo un par de objetivos en el horizonte, muchos pensamiento gravitando a mi alrededor y que con tiempo y una caña, iré poniendo en su sitio, a los que lleguen a desarrollar su tren de aterrizaje y a los que no o los espantaré definitivamente o los reservaré para un momento más propicio.Retos, metas... sí y por qué no: sueños.