Austin Creus acaba de cumplir dieciocho años, por lo que se prepara para finalizar el instituto y empezar una nueva etapa en su vida. Pero un día, salva a una niña de morir usando unas inusuales capacidades especiales que desde siempre ha fingido no poseer. Desde ese instante, observado por un misterioso hombre vestido de negro, que oculta sus ojos bajo unas gafas de sol, descubrirá el significado de sus poderes, por qué los tiene y quién es en realidad. Asimismo, durante sus aventuras para aprender a librar al mundo de los SOTs (Seres de Otras Tierras), encuentra diversos objetos que contienen recuerdos de su padre; escenas que el adolescente busca desesperadamente para intentar descubrir quién lo asesinó e hizo que todo el asunto pareciese un trágico accidente.Por lo visto, hace poco hubo una presentación de la novela en Barcelona, y a pesar de que el editor no pudo asistir todo fue muy bien. A ver si hay una presentación del libro por aquí cerquita y puedo ir. La verdad es que, como os he comentado muchas veces, los dragones no son mis seres fantásticos favoritos, y últimamente, además, estoy cansada de novelas juveniles (de hecho, mis últimas reseñas y las que me quedan por escribir se alejan de este tipo de libros) pero ese primer capítulo y esa portada (que gracias a la autora sabemos que es de Miguel Regodón Harkness) me llaman bastante la atención.
Dones especiales, dragones y batallas,
recuerdos borrados y otros encerrados en objetos,
dos mundos que se conectan,
verdades, mentiras y la sombra de la traición.
La vida de Austin está destinada a cambiar.
¿Y a vosotros? ¡Nos leemos!
Poy