Revista Diario
Al parecer los tres Reyes Magos ya tienen listos los regalos y han empezado su largo camino desde el lejano Oriente y con ello comienzan los nervios de muchísimos niños. Nosotros este año estamos libres de esa clase de nervios pero sospecho que a partir del año que viene la cosa habrá cambiado y mucho. Tendremos todo un año para explicarle al peque quienes son esos tres señores que vienen vestidos de esa manera tan extraña y subidos en camellos con un montón de cartas en sus sacas.Le contaremos la versión tradicional porque para empezar el Evangelio solo habla de magos, por lo visto en ninguna parte se dice que son reyes, ni que son tres y ni mucho menos sus nombres. A título informativo, no es sino hasta el siglo V en que se le da nombre a los tres Reyes y en un evangelio apócrifo. A partir de ahí mucho se ha ido hilando, entretejiéndose una bonita historia (en la que los Reyes siguen a una supuesta estrella, buscan al «Rey de los Judíos que ha nacido» en Jerusalén, guiándoles dicha estrella hasta Jesús nacido en Belén, y a quien ofrecen ofrendas de oro, incienso y mirra), con la gran mano entrometida de los comercios que además, tienen la clara intención de vender todos los juguetes que puedan y mas.En muchos países no saben ni quienes son estos tres señores y las fiestas acaban con la entrada del nuevo año. Recuerdo haber conocido una familia en Estados Unidos, ella americana y él de Puerto Rico, tenían dos hijos y querían inculcarles la tradición. Me sorprendió mucho que ellos pusieran una caja rellena de césped debajo del árbol, al parecer para los camellos. Yo nunca había escuchado tal cosa antes pero tiene su lógica, al fin y al cabo mis hermanas y yo les dejábamos leche y turrón a los Reyes y lechuga para los camellos y, en casa de nuestra abuela, dejábamos un zapato para que se acordaran de dejarnos algo allí también. Al final cada familia tiende a añadir sus propias tradiciones familiares y quedan guardadas en nuestros corazones en forma de entrañables recuerdos.Investigando un poquito he visto que el día de Reyes se celebra en España, casi toda América Latina, Francia y Filipinas. Curiosamente, los franceses hornean un pastel especial que lleva una sorpresa en su interior al igual que en México y España (el famoso Roscón de Reyes) y, en Filipinas, la gente acostumbra a colocar lámparas en forma de estrella en las ventanas.Es un mundo mágico este el de las tradiciones, sobretodo cuando los niños tienen tanto protagonismo, tradiciones y recuerdos algo diferentes según el país y el hogar de cada quien pero igualmente felices. Y para nosotros, los mas adultos no hay mayor alegría que ver a nuestros hijos tan felices y radiantes.Y tú, ¿cómo celebras el día de Reyes? ;)