Parece una versión yanki del poema de Espronceda:
Con diez carritos por banda,
viento en popa, a toda vela,
no corta el mar, sino vuela
una cortadora de césped.
Bajel pirata que llaman,
por su bravura, el Temido,
tomando cerveza va cocido
del uno al otro confín.
Genial el video de este amigo norteamericano que pasa por delante de una patrulla de policía, montado en su cortacésped y bebiendo una gran lata de cerveza, mientras tira de un convoy de 10 carritos de la compra cargados de cerveza en todas sus variedades, botellas, latas y barriles. Luego el poli se pasa un poco y le acaba deteniendo con muy malos modos. Pero la situación es de lo más surrealista: