"Yanqui go home", gritaron a un diplomático de la SINA en La Habana

Una mujer le grita a funcionario de la SINA "Yanqui, go home", en medio de otra protesta popular contra de los mercenarios (Damas de Verde) que tuvo lugar este domingo en la intersección de las calles 19 y K en el Vedado, según informó el blog Cambios en Cuba

La respuesta de los vecinos se produjo luego de que las llamadas Damas hicieran su circo habitual de cada domingo en la Iglesia de Santa Rita en la 5ta avenida de Miramar, continuó el blog.

A diferencia de otras protestas habaneras, según testigos, el rechazo popular se caracterizó por reconocer que los responsables, más que las serviles señoras, son quienes estimulan y financian, en este caso representado por un diplomático injerencista de la Oficina de Intereses de Estados Unidos en La Habana (SINA), Lowell Dale Lawton.

A tal punto Lowell ya resulta conocido vigilante de cuanto alboroto organice que el pueblo no creyó en diplomacia y alguien le gritó: ¡Hurón, recoge a tus ratas!

Por su parte, Laura Pollán que una vez más quedó en evidencia ante su propio pueblo este sábado anterior en la noche cuando entre otras pruebas vistas en TV, fuera denunciada por Carlos Serpa Maceira, supuesto corresponsal de Radio Martí.

Pero, la lideresa ha dicho hoy a la agencia AP que la revelación la "sorprendió'', aunque descartó pudiese afectarlas. Es de suponer que a los sorprendidos diplomáticos de la SINA no les quedara más remedio que sostener que las continúan apoyando.

En el documental de la serie “Las razones de Cuba” se escucha al golpista y asesino hondureño Roberto Michelleti llamando a Laura Pollán, y a esta dando las gracias por el apoyo. También se sabe que las Damas de Blanco reciben financiamiento de Santiago Álvarez perteneciente a los violentos de Miami.

No obstante, la señora ha hecho una afirmación a AP que no requiere comentario:

"Todas aquellas personas que quieran ayudarnos de buena voluntad, desde la derecha hasta la izquierda, sin condiciones, lo aceptamos, pero de terroristas no, porque no queremos vincularnos con hechos de sangre'', añadió.