Revista Sociedad

Yo de mayor quiero ser: ¡Becario!

Publicado el 28 abril 2011 por Imperfectas

Yo de mayor quiero ser... ¡becario! (por Isa)
Sólo me quedaban dos asignaturas para acabar la carrera, y aunque podría haber acabado hace dos años, me aconsejaron que 'me las dejase' para poder trabajar en la empresa donde estaba. Es que si no estabas estudiando no podían hacerme 'contrato de prácticas'. Mi curro no estaba mal y aunque la mayor parte del tiempo me han tenido sacando noticias de notas de prensa, he hecho de todo. Cubrir ruedas de prensa en el ministerio, sesiones en el Congreso y en el Senado, me han llevado de viaje al extranjero, he pasado días completos con famosos increíbles... ¡hasta una vez estuve en La Moncloa!
He estado tres años aquí y la verdad es que creo que no lo he hecho mal. Eso sí, cada vez que se acercaban las vacaciones de verano o los puentes y me decían que los no-contratados no teníamos derecho a días libres, me cabreaba bastante la cosa... ¿por qué no? ¡si yo curro como los demás! De todas formas con mis 300 euros al mes tampoco me da para irme a ningún lado...
Mi padre llevaba tiempo presionándome para que acabase los estudios. No entiende el sistema. Es un tradicional. Dice que soy un vago, uno de esos ninis que no hacen nada, y no se explicaba como podía estar tardando tanto en aprobar. Al final, el mes pasado, volví a presentarme a los exámenes, y aprobé. Y la verdad es que cuando me dieron las notas, me alegré.
En mi casa se pusieron muy contentos, pero en el curro no les ha hecho mucha gracia. Lo han visto como una traición. Por lo visto, ya no pueden contar conmigo, y lo que más les jode es que ahora tienen que enseñar a otro. Así que me 'echan', vaya... o bueno, echarme no, porque en realidad es como si nunca hubiese estado trabajando. Ni finiquito, ni derecho a paro, ni vida laboral, ni nada de nada...
Para colmo mi padre se ha vueto a enfadar. Dice que la culpa es mía por consentirlo, que tenemos lo que nos merecemos, que los derechos hay que lucharlos, que las cosas hay que cambiarlas... Al final, la he cagado. O eso parece. Y lo peor es que ya no puedo seguir siendo lo que mejor sé ser: becario.
"La resignación es un suicidio cotidiano" (Goethe)


Volver a la Portada de Logo Paperblog