Revista Salud y Bienestar
Otra de las "frases para empapelar consultas" que escuchamos con relativa frecuencia y que suele alargarse con explicaciones del tipo: -. ... pero mi madre insistió... -. ... pero fue mi mujer la que se empeñó en que viniese... -. ... pero todo el mundo en la oficina me decía: no dejes de ir al médico, ve a que te lo miren...
Una frase que quizá y en no pocos casos sólo represente un escudo, una justificación que el paciente usaría, a modo de protección y para cubrir la incomodidad que pudiera suscitarle la eventualidad de haber venido con una pequeñez o tontería...
Aún así y en honor a la verdad, ha de aplaudirse el hecho de que finalmente consultase: son muchas las cosas que empiezan siendo banales y acaban camuflando males mayores; no es necesaria la justificación por lo que a todas luces parece una decisión finalmente bien tomada!.