Me uno a dicho movimiento, por lo siguiente:
- Traerá atascos
- Traerá curas (aún más)
- Traerá monjas (sí, todavía debe de quedar alguna)
- Traerá pijos
- Traerá pancartas contra el aborto, portadas por curas
- Traerá de nuevo la discusión sobre "la familia" (su concepto de familia, claro)
- Costará dinero... del mío
- Pondrá en tensión a miembros de otras religiones
- Reducirá mi derecho a moverme por la ciudad
- Quitará sitios de aparcamiento
- Subirán los precios allá por donde pase
- Juzgará a nuestra sociedad, y alguien le escuchará
- No hará autocrítica (como buen político)
- Nuestros politicastros se le doblarán delante y no aprovechará para darles un capón.
- Exhibirá su riqueza impúdicamente.
- Ocupará tiempo de informativos (es un beneficio, si consideramos las alternativas)
- Centrará la atención de los tertulianos del "TDT Party"
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