Hoy quiero compartir una noticia que ha llegado a mis manos cuanto menos inquietante: el proyecto de construcción de un tanatorio con dos hornos crematorios junto a la Fundación Gil Gayarre, en Pozuelo de Alarcón.
Para los que no sepan de qué hablo, la Fundación engloba un Centro educativo de Educación Especial, Centro de día, Centro ocupacional y Centro especial de empleo, con más de 400 usuarios, además de trabajadores.
La conozco bien porque mi hijo ha sido alumno del centro de educación especial hasta que nos trasladaron hace un año.
El colegio da cobertura a varios municipios, dado que son muy escasos. En nuestro caso concreto, nos correspondía un centro en la Latina que quedaba lejísimos de casa, sin ruta y vergonzosamente masificado, y como nosotros, muchas familias.
Las instalaciones están ubicadas en un entorno natural, algo muy de agradecer en cuanto a la posibilidad de realizar actividades y el hecho de respirar aire puro. Este aspecto es importante, dado que muchos de nuestros niños tienen condiciones de salud debilitadas por patologías muy diversas, con un sistema inmunológico comprometido. Como comprenderéis, la posibilidad de respirar humos no es lo más idóneo. Pero ni en niños/personas con discapacidad ni sin ella.
Parcesa es la empresa que se encuentra detrás de este proyecto. La idea es construir un pequeño tanatorio pero con dos hornos crematorios. No es la primera vez que lo intenta, y parece ser que en Madrid al final se les denegó la construcción, tal y como refleja la publicación de El correo de Pozuelo con fecha 23 de septiembre.
Dicha obra afectaría la zona que rodea la carretera de Majadahonda, y estos serían los terrenos en cuestión:
Se ha constituído, por parte de la Fundación, una comisión de trabajo con la finalidad de obtener respuestas por parte la administración como informes técnicos y estado del proyecto, entre otras. Además, se va a tratar de contactar con representantes de movimientos que han conseguido paralizar proyectos similares (Navalcarnero o Villaverde entre otros).
¿Es necesario, realmente? Ya existe un tanatorio en Pozuelo de Alarcón con horno, y si es realmente necesario, yo me pregunto, ¿no existen otros terrenos donde ubicar estos servicios?¿Tiene que ser en una zona residencial y educativa?
¿Realmente no va a afectar a la salud de nuestros niños, trabajadores, usuarios, residentes?¿Ni siquiera el viento va a influir?¿Se va va crear una cúpula por arte de magia alrededor?
Entiendo que las instalaciones tendrán todos los controles necesarios pero hay algo inevitable y es que la combustión es una fuente de emisión de mercurio; arden además, elementos que se incineran junto a los restos como prótesis, efectos, que generan sustancias tóxicas, más aún.
No puedo entender este tipo de instalaciones en zonas urbanizadas.
No puedo entender como un municipio se presta a siquiera estudiar un proyecto de estas características. En otras localidades no lo quieren, ¿y allí sí?
Tal y como han estado estudiando los afectados, la ubicación de otros tanatorios de la misma empresa están muy alejados de núcleos urbanos, y, el que más próximo está carece de crematorio (M-40). Ahí lo dejo
Esperemos que con la fuerza, la unión de padres y trabajadores se consiga algo.
Desde luego cuentan con todo mi apoyo, porque además de todo eso, mi hijo volverá, y no quiero un espacio con humos para él.
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