La excusa: vamos a contratar una consultora externa que nos va a hacer tu trabajo, pero te puedes quedar como Administrativa, por el aprecio que tenemos... (Jajajajaja)..
Menos mal que me querían. La realidad: Decide cogerme mis 16 semanas de maternidad, y mis meses de vacaciones que me correspondían, y no supieron/quisieron entenderlo. De hecho, unas semanas antes, me llegaron a decir que no había estado al pie del cañon: (Perdonaaa!!! Estaba de baja maternal) Y pensé: Esto no puede ser, la Ley me tiene que amparar.... Pero ¡sorpresaaaa!!!!La ley te ampara de la siguiente manera: Una situación como ésta, se conoce jurídicamente como "modificación sustancial de condiciones de trabajo", y lleva aparejada una reducción de salario, que ni siquiera fueron capaces de cuantificar.
¿Y qué podía hacer?
Demandar a la empresa, pero.. la empresa no me lo comunicaba por escrito, tras pasar casi dos meses desde el fatídico 26 de septiembre, me comunican por escrito, mi modificación de condiciones. Pero no olvidemos que estaba recién parida, y amamantando, por lo que si de por sí es una situación estresante imaginad millones de hormonas dando guerra y haciendo un cocktail molotov con mis emociones.
Necesitaba estar tranquila, para criar a mis hijas. Recogerlas de la guardería con una sonrisa y sin la angustia de tener que ir a mi puesto de trabajo.Tras mantener una conversación con mis abogadas me trasladan las opciones que tengo:
- Si la sentencia declara justificada la decisión empresarial, tengo que seguir con la modificación acordada por la empresa, si bien se me reconoce el derecho a extinguir el contrato de trabajo y percibir una indemnización de 20 días por año de servicio, con un máximo de 9 meses.
- Si la sentencia declara la medida injustificada, reconocerá mi derecho a ser repuesta en mis anteriores condiciones de trabajo, así como al abono de los daños y perjuicios que la decisión empresarial hubiera podido ocasionar durante el tiempo en que ha producido efectos.
- Si se declara nula la decisión adoptada en fraude de ley o cuando tenga como móvil alguna de las causas de discriminación prevista en la Constitución o en la Ley, se reconoce mi derecho a ser repuesta en mi anterior puesto de trabajo, y se cuantifica una indemnización por los daños morales ocasionados.
A esta situación se le añaden un par de circunstancias agravantes: Mi marido también trabaja en el mismo grupo de empresas y vivimos en otra ciudad, por lo que perder el trabajo, implica cambio, mudanza, etc.. y volver al hogar del que salimos hace seis años.
La empresa en ningún momento se planteó la posibilidad del despido, ni de llegar a un acuerdo que fuera lo menos perjudicial para todos.
Al final, por circunstancias que no vienen al caso, conseguimos pactar la indemnización y salir por la puerta. Por esa puerta salieron muchas cosas, pero en ningún momento salió mi DIGNIDAD.
Quiero poder mirar a is hijas el día de mañana y poder decirles que yo NO TRAGUÉ.
Las empresas en época de crisis se aprovechan de sus trabajadores e intentan sacar lo máximo: no pagar horas extras, incrementar jornadas, reducir sueldos, tratar de manera inhumana. Nos encontramos ante un retroceso de derechos, pero la gente se calla por medio a perder sus puestos de trabajo.No hace mucho, una mamá bloguera, decía que a su marido no le dejaban cogerse el permiso de paternidad, y que le invitaban a cogerse las vacaciones. ¿vamos a seguir tolerando actitudes así?
¿Y no se merecen nuestros hijos que luchemos por ellos?
Hay muchas empresas que realmente lo están pasando mal, pero muchas otras se están aprovechando de la coyuntura, o recortan donde menos deben hacerlo:
¿cuántos sueldos de directivos se han rebajado en comparación con la de trabajadores medios?Renunciando a nuestros derechos no nos hacemos un favor, renunciando a nuestros derechos le hacemos un favor a los empresarios que no son solidarios y que no están a favor de la conciliación, ni creen en las personas.Cada vez que renuncias a pasar tiempo con tus hijos por el trabajo, éste no te lo va a agradecer. Y ahora piensa al contrario: ¿Cuánto te va a agradecer tu hijo cada minuto que pases con él? Cada vez que os regaléis un rato de risa y juegos, te lo va a pagar con el mejor salario: su sonrisa y sus risas.Yo ya no renuncio.
Este post lo escribí hace ya unos años, pero la situación no ha cambiado, sino que ha ido a peor, muchas mujeres nos encontramos en la misma situación con un único deseo: Volver a trabajar
Post escrito en 2013, para Marea Fuscsia
Desde aquí me uno al Movimiento de Malasmadres : Yo no renuncio, desde la cual se pretende obtener el reconocimiento de beneficios fiscales para las empresas que implanten jornada continua con flexibilidad horaria. Puedes apoyar desde aquí