You keep talking… I keep training!

En la sociedad actual muchas veces no se reconoce el esfuerzo de los demás. Se confunde el esfuerzo con el talento, la suerte con las constancia y no se valoran los sacrificios que hacen las personas para conseguir sus metas. Cuando vemos a alguien que ha conseguido algo intentamos por todos los medios reducir sus méritos. Esto, al igual que en otros ámbitos, pasa en el deporte y específicamente en el fitness y el culturismo.

Es posible que hayáis oído frases como las siguientes: si yo entrenara como tú estaría más fuerte, solo estas fuerte por polvos y sustancias, cualquiera puede hacerlo… Las personas que no son capaces de luchar por lo que quieren suelen usar este tipo de frases para justificar su cómoda forma de vida y hacer que el esfuerzo que ellos no pueden hacer deje de tener valor.

Existen personas que se ríen o menosprecian el estado físico de otros y los llaman obsesionados o enfermos por entrenar cinco días a la semana y hacer dieta. Podríamos asegurarte que cualquiera que se ría por estas razones es porque se siente mal consigo mismo, puede que incluyo hayan intentado lo que tu has conseguido y es la envidia la que habla por ellos.

Muchos no entienden la pasión que ponemos al entrenar, nuestras fuerzas para llevar una dieta, nuestra motivación para seguir sin dejar de intentarlo. Muchos nos critican por ser diferentes, nos llaman aburridos por no salir tanto, por no emborracharnos como la mayoría. No entienden que eso es lo fácil, lo que realmente te va a hacer sentir bien al día siguiente es aquello que requiere esfuerzo, mirarte al espejo y saber que estás más cerca de tu meta.

Habrá quien piense que no somos felices con el sacrificio que hacemos, que no disfrutamos de nuestra vida… ¡pero vaya si lo hacemos! Disfrutamos entrenando, mejorando cada día, sintiendo de esta forma que somos capaces de todo. Es posible que sea más feliz alguien que no se preocupe de su físico pero nosotros no somos capaces de ver las cosas de otra forma. No podemos imaginar algo que ocupe nuestro tiempo libre y que nos guste más que entrenar.

Pero tan malo es criticar por no tener como alardear de lo que no se tiene.

El fitness está de moda y los gimnasios están más abarrotados que nunca. Ahora es más común cuidarse y tener un buen estado físico pero muchos exageran su verdadero sacrificio y lo hacen más para los demás que para ellos mismos. Nos referimos a esos chicos que llevan en el gimnasio unos meses y se tatúan frases como “No pain no gain” y cosas similares. Luego son esos que no siguen una dieta, que no han hecho un peso muerto ni una sentadilla en su vida y que salen a emborracharse cada fin de semana. Lo fácil es tatuarse, lo difícil es sacrificarse y privarse de ciertas cosas que a todo el mundo le gustan. Lo fácil es entrenar y hacer el “animal” en el gimnasio, lo difícil es levantarse antes todos los días para preparar tus comidas del día siguiente, lo difícil es entender que esto no es entrenar o seguir una dieta es un estilo de vida.

Hay muchas opiniones acerca del fitness y del culturismo y solo los que se sacrifican realmente día tras día saben lo que es. Es  muy fácil decir “este está fuerte por que se ha metido tal cosa”… lo difícil es tener la capacidad de entrenar día tras día y hacer dieta como para además tener que aguantar a gente que quiera echar por tierra todos tus méritos. Así que ya sabes: entrena duro, lucha por lo que quieres y que no te importe la opinión de personas que no te conocen o que solo quieren dejarte en mal lugar. Envidiosos hay en todas partes…