Zapatón: El Payaso Cubano condenado por la Dra Polo

Este podría ser quizás el único CASO CERRADO que la Dra Polo tiene aún completamente abierto. Se trata de la historia de un prestigioso artista de Cuba, radicado en el Sur de la Florida, quien lejos de beneficiarse con su aparición televisiva en el popular Show de la Dra Polo, ha entrado en desgracia.

Ernesto Molina Gutiérrez es un reconocido artista cubano. Y digo artista porque además de sus trabajos como actor,  es un nombre de referencia en las artes plásticas,  donde sobresale como restaurador y creador de obras con las que ha ilustrado la cubanidad con especial esmero.

Ernesto Molina fue en muchas ocasiones el galán de las telenovelas de turno o el protagonista de los seriales policíacos, también le vimos como cantante o declamador en grandes espectáculos conmemorativos dentro y fuera de Cuba. Sin embargo, un personaje creado por él, le supera en todas las apuestas. Se le ha ido de las manos para bien por su simpatía y emoción, por su ternura y profesionalidad.

Desde hace más de dos décadas para muchos, Ernesto Molina, es simplemente el payaso Zapatón, una mezcla de todas sus habilidades en función de un espectáculo en vivo que deja con la boca abierta a niños y padres. Desde hace mucho tiempo, además de contentar a grandes y chicos, Zapatón es en gran medida El Payaso de las Celebridades.

Pero, un mal manejo ha echado por tierra su consagración y esfuerzo. Ernesto Molina fue invitado a comparecer como Payaso en uno de los shows de la Dra Polo para Telemundo, con el objetivo de dar explicaciones como experto,  acerca de uno de esos casos en los que la ficción alcanza los niveles que sólo la realidad supera.

El objetivo era que Zapatón o más bien Ernesto Molina explicará la postura ética de los payasos, los objetivos para los que se diseñan este tipo de personajes o todo lo bueno que significan, en medio de una historia que involucraba acciones espeluznantes que nada tienen que ver con el artista.

Pero la falta de profesionalidad del equipo de la Dra Polo, en su mayoría productores improvisados en busca de Pan y Circo, le cobraron a Ernesto Molina la más cara de sus facturas. Al colocar en internet los momentos que remiten al show en la plataforma de Youtube, bajo el título “Payasos asesinos” la imagen que sale es la del honrado Zapatón el cual ha pagado todas las consecuencias.

Desde entonces, Zapatón ha dejado de alegrar a muchos niños, ha mermado considerablemente sus apariciones en fiestas de cumpleaños, ha tenido pérdidas monetarias de más del 80 por ciento respecto a igual período en comparación con sus ingresos antes del fatal desenlace del show que manchó su carrera para siempre.

No pasa un día sin que Zapatón reciba insultos en las redes sociales y vía telefónica, y lo peor: no pasa un día sin que la información que lo condena permanezca disponible en youtube.

Ernesto Molina ha intentado hablar una y otra vez con la mismísima Dra Polo, pero su séquito al parecer infranqueable se lo impide. Estas son las santas horas en las que no dispone ni de solución ni de respuesta, que no es lo mismo aunque parezca igual.

A todas estas, cuando habla como el Payaso que es, ante las cámaras de Qmonada Live en entrevista concedida al comediante Alex Otaola, Zapatón en primera instancia deja por sentada su declaración de principios tras escuchar los comentarios de unas noticias que se relacionan con las Elecciones de este noviembre en EE.UU y dice por las claras: “Me parece una falta de respeto a los payasos del mundo que la gente compare a Donald Trump con un Payaso. Ningún payaso de la humanidad merece este tipo de comparación”.

Con información de Qmonada y Redes Sociales de Ernesto Molina.

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