Hace unos días nació en nuestro país el primer bebé con secuelas neurológicas a causa del Zika, enfermedad que su madre contagió en un país latinoamericano.
Si bien es cierto que todavía no se ha dado ningún contagio autóctono en nuestro país, el que en un futuro no muy lejano lo haya, sí que es verdad que aunque pueda parecer algo difícil, no es imposible.
Por lo que más vale prevenir que curar. Por eso, aquí algunos consejos, para que entre todos, consigamos evitar que esta enfermedad cause algún que otro susto en nuestro país.
Cómo ya os conté hace un tiempo (Zika, el nuevo quebradero de cabeza para las embarazadas), es cierto que aquí no tenemos el mosquito latinoamericano transmisor de esta enfermedad, el Aedes aegypti, pero sí tenemos a su primo hermano, el Aedes albopictus, más conocido como mosquito tigre y responsable ya en Europa de la transmisión de determinadas enfermedades tropicales, antes inexistentes en nuestro entorno, como el caso de agosto de 2015 en el que Sanidad detectó el primer caso de Chikugunya en España transmitido por este mosquito tigre, una enfermedad vírica que produce fiebre y fuertes dolores articulares, pero también otros síntomas como dolores musculares y de cabeza, náuseas, cansancio y erupciones cutáneas.
Como podéis ver en el mapa de distribución del mosquito tigre, está ya más que establecido en la zona mediterránea, y año tras año va ganando terreno hacia otros lugares.
La “suerte” que tenemos aquí, es que por nuestro clima, el mosquito tigre en invierno entra en latencia y sólo se multiplica y actúa en verano. Y en lugares muy fríos, como en alta montaña, no se establece, ya que a bajas temperaturas mueren sus larvas. Todo esto nos da margen de maniobra para intentar controlarlo.
Otra ventaja que tenemos es que el radio de acción de este mosquito suele ser de unos 200 metros. Es decir, el mosquito deja las larvas en un recipiente artificial seco, llueve y se recubre de agua, se desarrollan las larvas y nace el mosquito, pero este mosquito sólo se moverá en un radio de unos 200 metros, por lo que los mosquitos que tienes en tu casa han nacido cerca o en tu propia casa. Así que si hacemos caso a estos simples consejos, tanto nosotros como nuestros vecinos, seremos capaces de conseguir que este mosquito no se convierta en nuestra pesadilla. En nuestra casa, ha habido veranos que no hemos podido salir al jardín ¡durante todo el día! era salir y estar rodeados por esta plaga de mosquito. Ya podíamos nosotros vaciar los recipientes de agua y seguir las demás recomendaciones, que si los vecinos no lo hacen, no hay nada que hacer.
La forma más efectiva de combatir al mosquito tigre es no dejarlo criar. Por eso hay que evitar las acumulaciones de agua.A diferencia de otros mosquitos, el mosquito tigre no necesita mucha agua para crecer. Sus larvas crecen perfectamente en pequeñas reservas de agua estancada como la que puede quedar dentro de un tiesto, un cubo, o hasta en un cenicero.
Y, ¿cómo podemos evitar que este mosquito crie en nuestra casa?
Fuente: Dipsalut (Diputació de Girona)
- Limpiad las pluviales de casa de hojas, para evitar que quede agua estancada cuando llueva.
- Cerrad herméticamente con una tapa o tela mosquitera los depósitos de agua, para que no puedan acceder los mosquitos y dejar sus larvas.
- Si tienes una fuente o estanque en el jardín, poned peces rojos (se comen las larvas de los mosquitos).
- Vaciad el agua de los sumideros o tratarla periódicamente con un producto larvicida.
No olvidéis, la lucha contra este mosquito, de molestas y dolorosas picaduras, y transmisor potencial de enfermedades, es COSA DE TODOS.