Revista Comunicación
Una cosa es la ciudad que el alcalde de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, ve —o sueña— y otra muy distinta cómo la vive el ciudadano de a pie. Hay veces que la comparación de ambas percepciones, amén de odiosas por incómodas, ponen de manifiesto visiones tan contrapuestas que parece que ambos —alcalde y ciudadanos— viven en dos ciudades diferentes.
La Fundación Antares Foro y el Centro Andaluz de Prospectiva han hecho público estos días el XVI Barómetro Socioeconómico de la ciudad, un termómetro que con periodicidad semestral no muestra el estado de salud de la urbe en que vivimos según la percepción de quienes la disfrutan o la sufren.
El paro, como no podía ser de otra manera, continúa siendo el principal problema para el 68,2% de los ciudadanos, casi siete de cada diez. Desde enero de 2011, el porcentaje de sevillanos que entienden que esta lacra es el escollo más dificultoso de la vida diaria se ha incrementado un 51,6%, a pesar de la gestión de quien se autoproclamó alcalde del empleo.
La limpieza es el segundo problema para el 10,5% de los sevillanos, porcentaje que se ha incrementado desde 2011 en un 45,8% y el tercero la crisis económica con un 8% y un incremento desde que entró a formar parte de las preguntas del sondeo (junio de 2012) de un 8,11%.
En lo que a afección a la vida de los habitantes, el paro también bate todos los récords con un 48% de los ciudadanos que así lo afirman. Desde enero de 2011 se ha incrementado un 49,1% —1 de cada 2 personas— las que consideran que es el problema que más les afecta. Le siguen la crisis económica, con un 12,3% y un espectacular incremento desde enero de 2011 del 70,8%, y la limpieza, con un 8,9%. La afección del paro en el entorno familiar alcanza ya a un 71,4 de los sevillanos, siete de cada diez.
En lo referente a la valoración que los ciudadanos otorgan a la gestión del Ayuntamiento hay de todo, como en botica. Mientras aprueba en Tráfico con un 5 raspado, Centros de Enseñanza (5,4), Parques y Jardines (5,6), Seguridad (5,6) y Transporte Público (6,4), suspende en Viviendas de Protección Oficial (4,6), Limpieza (4,9), Servicios Sociales (4,8) y especialmente en Economía (2,9).
Los incrementos más importantes desde enero de 2011 se producen en transporte público (23,6%) y seguridad ciudadana (26,4%), coincidiendo con el incremento de oferta de Tussam desde que Zoido llegó a la alcaldía y con el aumento de plantilla en la Policía Local.
Sin embargo, la vivienda, los servicios sociales y la economía siguen siendo los puntos flacos del actual equipo de gobierno que no sólo no aprueba en esta ocasión, sino que sufren decrementos en sus valoraciones desde enero de 2011 del -8%, -21% y -3% respectivamente.
La situación global de la ciudad es percibida por un 75,5% de los sevillanos como igual o peor en el último año, habiéndose incrementado el porcentaje de ciudadanos que así lo creen desde enero de 2011 en un 58,6%.
Si se circunscribe la mirada a los diferentes distritos que componen la ciudad, el paro es el principal agobio con porcentajes muy elevados en las zonas más castigadas como Cerro-Amate y Este (60%), Norte, San Pablo-Santa Justa y Sur (57,5%) y Macarena (52,5%). Esto pone de manifiesto el severo castigo que esta lacra está propiciando a las zonas más desestructuradas de Sevilla.
De hecho, cuando se pregunta por la afección del desempleo en el entorno familiar, las cifras se disparan. En el 80% se sitúan Cerro-Amate, San Pablo-Santa Justa y Macarena Norte, en el 75% Este, Macarena y Sur. Palmera-Bellavista en el 72,5% y Casco Antiguo y Los Remedios en porcentajes superiores al 60%. Sólo Triana baja de esas cifras con un 55,5%.
Los barrios valoran pésimamente el estado de la ciudad con respecto a hace un año. Casi todos consideran en porcentajes superiores al 70% que está igual o peor que entonces. Especialmente significativo es el caso del distrito Sur, donde un 85% de sus habitantes son de esta opinión. Sólo Nervión desciende de esas cotas, donde un 67,5% de los ciudadanos piensan de esa manera.