Ya sea por un rato, acompañado o de súbito solo, la tentación que el buen tiempo en combinación con el vibrante recorrido nos ofrece es extrema.
Tomemos la bicicleta o, en su defecto, la mano de una persona que nos agrade, si bien podemos emprenderlo juntos en un mayor grupo; cada cual, que lo enfoque a su manera: elementos no faltan, la fórmula longitudinal es clara y concisa, sólo diversión, entretenimiento y alegría os esperan.
¿Queréis Arquitectura? ¿Contemporánea, postmodernista, ecléctica, neo? Ejemplos, muchos. En un cordón del Danubio ramificado, que por el centro de la ciudad se abre camino, aparecen nudos de interesante estancia...Nombres relevantes, como Zaha Hadid o Jean Nouvel, experimentos sobre el agua, rascacielos (que no lo son tanto) que se asoman, estaciones de U-bahn y arena de playa en pleno centro de Europa.
De una punta a otra vislumbramos las estampas más anodinas y brutalistas del efecto postmo, a su altura en la Universidad, obras de Hundertwasser en ciertos nódulos, grafiteros insaciables y autorizados a tal faena en las paredes del Flex y cercanías, un trozo de Tel Aviv en una soleada franja, una piscina que flota cristalina sobre las turbias aguas al lado de un barco...no, “edificio con forma de”, un sobrio Urania y su cine a la orilla...hasta perdernos en un extremo en el que de nuevo el agua regresa a su dueño...Alucinante viaje, todo en variable de 3 a 10 metros, ambos lados de la sección vigilado por los ojos de la capital austríaca y de los que por la parte superior transcurren, en su mayoría, turistas italianos...
Habrá sido intenso, no me cabe duda y cada componente, insisto, se quedará con sensaciones diferentes, tal vez menos arquitectónicas las de algunos pero, sin duda, acompañadas de un buen sabor de boca acaecido entre dos muros, muchos árboles y, sobre todo, aGua
Agradecimientos a Davi por las instantáneas...y hoy, la puntilla, que sea con un “Prost” y una weizenbier en las manos de los que brindan y un deseo de feliz verano; recomendada, encarecidamente, la visita a Viena.
Hasta luego,
B’aC
Javi