Revista Comunicación

10 características que debería cumplir el diseño de tu web

Publicado el 01 septiembre 2015 por Mancerareyes

Autor: Mancera Reyes. Publicado el 1 septiembre, 2015. Comentarios: 2. Categorías:

10 características que debería cumplir el diseño de tu web

Quisiera dar a conocer 10 características que debería cumplir el diseño de tu web tras reflexionar sobre algunas de mis visitas a clientes. Algunos tenían una web y la habían abandonado porque la consideraban un gasto inútil y no aportaba nada a su negocio. No conozco los verdaderos motivos de por qué no funcionaron, pero apostaría a que muchos de ellos pagaron por un diseño y pensaron que la web funcionaría por sí sola, como si al abrir un comercio en una calle apartada y difícil de localizar fuese a funcionar por el mero hecho de existir. Hay que mimar el comercio, cuidarlo y darlo a conocer, ¿verdad? Pues una web necesita lo mismo, pero muchas veces se desconocen sus particularidades y su potencial y por eso se descuidan. Es mejor saber qué nos puede ofrecer nuestro sitio web y qué debemos cuidar. A continuación hablaré sobre los aspectos más importantes que debería cumplir el diseño de tu web para que sume valor a tu proyecto.

1.- Debe cumplir uno o varios objetivos.

Sí, esto es lo primero que debes tener claro. ¿Para qué haces una web? ¿Qué aportará a tu negocio? ¿Cómo configurar la web para ayudarte a conseguir las metas establecidas? Cada cual tendrá su objetivo o más de uno: vender productos, darse a conocer, establecer otra vía de contacto, ofrecer información de utilidad, crear un punto de encuentro sobre algún tema (como una red social o un foro), etc., etc..

Ten claras tus metas, priorízalas por orden de importancia y trabaja para que tu web se oriente a cumplir tus objetivos. Si vendes, facilita la búsqueda de productos, la localización del carrito y el registro de los clientes. Si quieres un medio de contacto, haz muy visible el teléfono o el formulario. Si quieres darte a conocer, facilita información relevante sobre ti, crea un blog y facilita el intercambio de impresiones con tus usuarios. Si quieres que tus clientes reserven citas, ponles muy a mano el formulario. En definitiva, analiza tu proyecto y busca las soluciones más pertinentes.

2.- Una web bien estructurada con los elementos importantes fácilmente localizables.

Uno de los principales motivos por los que los usuarios pueden abandonar un sitio web es por la dificultad para encontrar lo que busca. Jerarquiza tu información y distribúyela inteligentemente. Distingue lo importante de lo que no lo es tanto y ponlo muy a mano para tus usuarios, que no tengan que hacer varios clicks para llegar hasta esas páginas esenciales o hacer scroll para ver un elemento indispensable.

Reflexiona sobre si el esquema de navegación, es decir, como divides y ordenas la información en páginas y enlaces, es el más adecuado. Observa también las estadísticas de tu web. ¿Los usuarios navegan como tú esperas? ¿Llegan a las páginas más importantes? Además, deberías conseguir opiniones ajenas e imparciales de tu proyecto. Pregunta a conocidos si les resulta fácil dar con tu teléfono de contacto, o si les llama la atención ese anuncio que pusiste al lado de tus contenidos, o si el formulario de suscripción lo ven inmediatamente. Si no les resulta fácil, haz cambios.

3.- Consulta las estadísticas de uso de tus páginas web y el posicionamiento en buscadores.

No puedes mejorar tu web si desconoces cómo funciona. En el punto anterior hablaba de preguntar a conocidos si encontraban los elementos importantes con facilidad. En esta ocasión se trata de ver con qué palabras te encuentran en los buscadores, a qué páginas llegan y a cuáles no, de dónde son tus usuarios, qué idiomas hablan, si usan móviles o PCs, etc.. Para ello puedes usar aplicaciones de estadísticas web, como Google Analytics, el más conocido y usado.

Este asunto está directamente relacionado con el SEO (posicionamiento en buscadores). Se trata de conseguir enlaces que apunten a tu web, de colocar palabras clave en los lugares adecuados y analizar el funcionamiento de tu web. Es un asunto del que hablar largo y tendido y se sale de la misión de este artículo. No obstante, hay mucha información en la red y en CMS como WordPress existen plugins que te ayudarán a mejorar el SEO de tus páginas.

No obstante, estas aplicaciones de estadísticas deben colocar cookies en los dispositivos de los usuarios, algo de lo que debes avisar y ellos aceptar. Y estás obligado a comunicarlo, ya que está recogido en la Ley de Protección de Datos. También debes informar sobre otras cookies y cumplir las leyes establecidas.

4.- Las interacciones deben dar los resultados esperados.

Al analizar las estadísticas puede que llegues a preguntarte por qué los usuarios visitan la página de contacto, pero no rellenan el formulario. O por qué nunca entran en la página de servicios si está fácilmente localizable. Puede deberse a un error en el código de la web. Si tienes muchas visitas, pero nadie rellena el formulario, quizá haya un error en el envío de los datos o en la validación de algunos campos. Si las páginas tardan mucho en cargar, comprueba que las imágenes tienen el tamaño adecuado o si es culpa del hosting que tienes contratado. En fin, investiga y no ignores los problemas.

De todas formas, pueden darse errores sin que haya fallos en el código. Debes tener una página personalizada de error, conocidas como 404, y ésta debería dar opciones para seguir navegando en vez de limitarse a informar del fallo.

Como añadido, decir que esta página de error aparecerá con frecuencia tras cambiar la dirección de una página y no hacer una redirección 301 para enviar a los usuarios de la dirección antigua (y que aún permanecerá vigente en los resultados de los buscadores) a la nueva dirección o a una alternativa.

5.- Trabaja la seguridad de tu web: protégete y protege a tus clientes.

Robo de datos de tus clientes, ataques a tu base de datos, inclusión de archivos dañinos o uso de tu e-mail para mandar spam (correo basura) son sólo algunos de los ataques que puedes recibir si no tomas las medidas adecuadas. Consulta con tu programador las precuaciones necesarias para evitar los posibles ataques que puedes recibir, porque no necesitas la misma protección si tienes una web de información y contacto que un comercio electrónico con datos personales de cientos o miles de clientes.

6.- Diseño web adaptable.

Son muchos los dispositivos que nos permiten navegar por internet. Atrás quedaron los tiempos en que era un privilegio de los ordenadores. Hasta es muy posible que tengas más visitas desde móviles o tablets que desde PCs. El HTML5 y las CSS3, las últimas tecnologías de maquetación web, ponen medios para facilitar que una web se adapte a distintos tipos de pantallas y formatos. Exige esas tecnologías. O quizá prefieras redirigir a un subdominio con una maquetación exclusiva para dispositivos móviles. Sea como sea, procura que tu web sea amigable con el máximo número de dispositivos posible.

7.- Facilita que los usuarios puedan compartir tus contenidos e informa regularmente a tus seguidores.

Hay que dejar en la red muchos links para que los potenciales clientes den contigo. Una forma fácil de conseguir enlaces que apunten a tu web es que los usuarios compartan tus páginas en Facebook y otras redes. Además pueden llegar a verla cientos de personas y algunas de ellas interesarse por lo que ofreces. Es mejor que tu web esté bien comunicada, ¿no crees?

Pon un elemento que permita a un visitante compartir de forma fácil tus páginas, trabaja las imágenes y los elementos adecuados para que sean visibles cuando se compartan (¿no te ha pasado que al compartir una página no te cargaba ninguna imagen?), pon enlaces a tus perfiles en redes sociales, permite a los interesados mantenerse informados de tus novedades con un formulario de suscripción. Mantén una comunicación fluida con tus usuarios y deja que hablen de ti.

8.- La identidad visual de tu marca debe estar bien representada en tu web.

Ya en el post anterior comentaba que la estética da personalidad. Tu empresa o tu proyecto tiene unas características y tienes una forma concreta de dar tu servicio y deben quedar reflejadas de forma visual en tu logotipo y en todo lo que te pertenezca u ofrezca información de tu proyecto. A Apple, Coca-Cola, Nike y demás los reconoceremos en seguida por su logo, pero también por la estética que aplican a sus paquetes o envases (packaging), publicidad, sitio web, etc., porque cada uno tiene su estilo propio y son reconocibles.

Pues tú tienes que hacer lo mismo en tu web. Coloca tu logotipo en un lugar destacado. La estética y colores usados deben ser los definidos en tu manual de identidad corporativa, para que cuando un cliente vea tu web, una tarjeta o un flyer sepa de quién es casi sin consultarlo.

9.- Imágenes de calidad.

Las imágenes que acompañan tus textos y tu publicidad causarán una impresión notable. Fotografías mal iluminadas y con un fondos poco trabajados de tus productos hará que mucha gente decida no comprar. ¿Por qué, si es un buen producto? Porque en la web no lo pueden tocar ni oler. El producto debe convencer por la vista y por lo que cuentes. Mejor dar una buena impresión a la primera. Igual ocurre con los iconos que acompañen tus menús o servicios. Mejor si son buenos y representan adecuadamente lo que pretenden representar.

Por otro lado, vigila que las imágenes no ralenticen la carga de tu web. Deben tener el tamaño adecuado y un equilibrio entre compresión (para que pesen lo menos posible) y una calidad más que aceptable. Si tienes iconos, comprueba que se vean nítidamente en los smartphones. De nuevo el HTML5 tiene medios para lograrlo.

10.- Mima tus textos. También son parte de tu identidad.

Trabaja tus textos y evita poner esos formulismos que usan muchos, por ejemplo, "Miempresa apuesta por la innovación y el desarrollo y ofrece unos productos de calidad a precios competitivos". 17 palabras impersonales que no concretan nada de lo que haces. Evita en lo posible las generalidades y las vaguedades y demuestra lo que haces con ejemplos y fotografías. Usa el lenguaje adecuado a tu tipo de clientes: técnico para profesionales, sencillo para un público amplio, culto para un público erudito, informal para un público que busca ocio y diversión, etc..

10 + 1

El tiempo en el que una web solamente ofrecía información pasó hace años. Hoy en día las web son elementos muy completos y una parte importante de la estrategia de marketing de las empresas. Por ello mismo necesitan cumplir más condiciones que antes. Existen opciones de tener tu web gratis, pero, generalmente, no cumplirán muchas de las 10 características que he comentado. Nadie da duros a pesetas. A la larga, si consideras tu web un elemento que puede aportar valor a tu negocio, necesitarás ampliar funcionalidades y tendrás que pagar mensualmente por usarlas. Al cabo del año verás que pagas un dineral. Una mejor opción, aunque al principio parezca la más cara, es contactar con profesionales cualificados, a veces con más de uno (programador, SEO, fotógrafo), que te hagan una web que tú mismo puedas gestionar. Además, podrían ofrecerte información cualificada sobre lo que necesitas y aportar soluciones. Al cabo del año puede ser más caro que la opción gratuita a la que sumas funcionalidades, pero seguro que no lo será al cabo de dos años, porque habrás amortizado la inversión y no seguirás pagando una buena cantidad año tras año.


Volver a la Portada de Logo Paperblog