¡El curso está en marcha! Es hora de volver a estudiar, de preparar exámenes… Estudiar en casa puede resultar una tarea complicada, por eso es necesario crear un espacio productivo para el aprendizaje que nos ayude a maximizar el tiempo, evitar las distracciones y mejorar el rendimiento. La clave principal es la autonomía, esencial para que los niños y adolescentes puedan llevar a cabo esta tarea con éxito y además, adquieran habilidades para la vida.
¿Cómo les ayudamos a conseguir autonomía?
Es una tarea que debemos ir haciendo desde pequeños, al principio acompañándoles, supervisándoles y poco a poco irles dando la responsabilidad y autonomía.
Aquí tenéis algunas estrategias para lograrlo:
- Establecer rutinas claras.
A través de un horario fijo que les ayude a gestionar su tiempo de manera efectiva. En este horario debe aparecer claramente cuándo es momento de estudiar, cuánto tiempo y el qué y establecer los descansos oportunos para mantener la atención.
- Crear un espacio de estudio adecuado.
Elegir un lugar tranquilo y bien iluminado para minimizar distracciones y promover la concentración. Silenciar el teléfono, cerrar las redes sociales y tener todos los materiales de estudio necesarios a mano.
- Tener unas metas claras.
Saber qué quiere conseguir, estableciendo unas metas claras y alcanzables, marcándose unos objetivos específicos y reajustando sus expectativas le ayudará a gestionar el estrés.
- Celebrar su esfuerzo.
Es mucho más efectivo y gratificante para un niño o adolescente reconocer lo bien que lo está haciendo y su esfuerzo, que las calificaciones. De esta manera, su confianza aumentará y estarán más dispuestos a enfrentar los retos académicos que se le presenten.
- Ofrecer apoyo, no soluciones.
Es decir, estar disponible para ayudar, pero sin resolver las tareas por ellos. Así, guiándoles con preguntas que les hagan pensar y encontrar la solución por sí mismos, fomentamos la independencia y la confianza en sí mismos
- Fomentar la autoevaluación.
Que niños y adolescentes revisen su propio trabajo les ayuda a desarrollar un pensamiento crítico y a mejorar sus habilidades de autogestión.
- Promover el equilibrio y el bienestar.
Mantener un equilibrio saludable entre el tiempo de estudio y su tiempo de descanso y el tiempo de ocio es importante para mantener una buena salud mental y física y evitar posibles trastornos o problemas.
- Desarrollar habilidades de resolución de problemas.
Enseñar a los niños a abordar los problemas les ayuda a ser más autónomos y responsables de sus decisiones, lo que les será útil en cualquier ámbito de su vida.
- Animar a que asuma la responsabilidad.
Apoyar la autonomía animándole a asumir la responsabilidad de su propio aprendizaje, gestionando su tiempo y tomando sus propias decisiones. De esta manera el interés y la motivación aumentarán considerablemente.
- Mantener una comunicación abierta.
Es fundamental mantener una comunicación abierta sobre sus tareas: escuchar sus preocupaciones y ofrecer apoyo emocional les ayuda a sentirse seguros y motivados.
Con estos pequeños pasos, no sólo contribuimos al éxito académico, también a un desarrollo integral del niño y adolescente, a nivel social y emocional. Aprender puede ser difícil en ocasiones, pero con una mentalidad positiva, dedicación, compromiso y vuestro apoyo, podrán superar cualquier dificultad.
Marta Lli
Directora del Dpto. de Psicología y Orientación Escolar
La entrada (10 estrategias para apoyar a niños y adolescentes con las tareas escolares), se publicó originalmente en Orientablog