Recién terminada Fear The Walking Dead (os cuento mis impresiones sobre ella aquí), comenzaron, como era de esperar, las comparaciones con su serie madre. Y ya se sabe que las comparaciones son odiosas, pero en este caso, además, han sido injustas: porque sí, no hay duda de que Fear The Walking Dead ha estado mejor estructurada y ha sido mucho más consistente e interesante que las dos primeras temporadas de The Walking Dead, pero me parece precipitado ir afirmando tan alegremente como ya hacen algunos que el spin-off superó a la serie original. ¡Y todo esto con solo seis episodios, menuda proeza!
A modo de contra-argumento, y para celebrar que pronto estrena su sexta temporada, hoy os hablo de 10 grandes momentos de The Walking Dead. Escuchando solo a sus detractores, cualquiera diría que la serie entera ha sido un auténtico ñordo a excepción del piloto, la trama del Gobernador y los finales explosivos que se marcan con hordas de zombis de vez en cuando. Pero The Walking Dead es mucho, mucho más, y estos 10 momentos hablan por sí solos de lo que la serie puede llegar a ser cuando se lo propone:
1) El paseo entre los muertos vivientes
Las tramas y personajes de la primera temporada se ven muy lejanos (especialmente porque casi todos están muertos a estas alturas), pero esos primeros episodios, rodados en Atlanta, tiraron la casa por la ventana y nos dejaron algunas de las escenas más memorables de toda la serie. Si tengo que elegir una, me quedo con ese mítico paseo de Rick y Glenn a través de los zombis, cubiertos de sangre y vísceras para camuflarse. Comenzaba la fiebre zombi...
2) La conversión de Sophia
La temporada de la granja de Pin y Pon no es la mejor, ya lo sabemos (aunque, desde luego, no es tan mala como la pintan algunos), aunque eso no excluye que también nos dejara momentos para el recuerdo. La conversión a zombi de Sophia, y la forma en que Rick tuvo que rematarla, causó una gran conmoción y enlazó con ese momento del piloto en que Rick también tuvo que asesinar a una niña zombi.
Carol no fue lo suficientemente fuerte como para rematar ella misma a Sophia, pero temporadas más tarde tendrá que disparar también a otra pequeña y adorable niña psicópata, como finiquitando una cuenta pendiente del pasado, y cerrando de esa manera un círculo que tan ingeniosamente The Walking Dead ha planteado a lo largo de las temporadas. Y confirmándonos que esta serie odia a las niñas rubias... mucho.
3) La resistencia de Andrea durante la caída de la granja
Nunca me cansaré de decir que Andrea es un genial personaje al que se odió de manera exagerada e injustificada por su trama de la tercera temporada. Se la acusó de tonta por no saber ver al principio que el Gobernador estaba como una chota (y yo me pregunto: ¿cómo iba a saberlo? ¿Qué habríais hecho vosotros en su lugar?) y por tratar de buscar una solución al conflicto donde nadie muriese, algo que casa completamente con su personalidad y con su pasado de abogada.
Andrea fue la Carol de su momento: una mujer desencantada con la vida que renació de sus cenizas y se convirtió en una auténtica todoterreno, por mucho que Lori quisiera mandarla a hacer la colada. Verla luchando por sobrevivir en el finale de la segunda temporada (en contraposición al final de la primera temporada, donde quería morir), corriendo exhausta por el bosque, sola, fue el gran clímax que remató una historia apasionante de superación personal. ¡La rubia no era tan tonta ni tan débil, después de todo!
4) La muerte de Lori
Ya lo dijo la misma Lori con mucha guasa: no va a ganar ningún premio a Mejor Esposa ni a Madre del Año, y desde luego no es el personaje más querido de The Walking Dead. A pesar de todo, su emotiva despedida hizo llorar incluso a su mayor hater. Un golpe de efecto brutal y al mismo tiempo hermosísimo que marcó un antes y un después en la serie.
(Pero admitamos que se está mucho mejor sin Lori).
5) El interrogatorio del Gobernador a Maggie
Casi todos los espectadores estamos de acuerdo en que la trama del Gobernador (al menos, al principio) fue espectacular. Podríamos hablar de varios momentos cumbre -vale la pena mencionar la memorable pelea cuerpo a cuerpo entre el Gobernador y Michonne-, pero el momento que me puso los pelos de punta fue la "casi" violación a Maggie Greene.
El choque entre dos actores de la talla de Lauren Cohan y David Morrisey fue brutal. Sin tan siquiera tocarla apenas, sin llegar a forzarla realmente, la escena del interrogatorio fue una espeluznante sesión de tortura psicológica que puso a prueba a Maggie y terminó demostrando la fortaleza de su carácter.
6) Las pesadillas de Michonne
Michonne es uno de los personajes más jugosos de The Walking Dead. y uno de los que, junto a Daryl, siempre ha sido tratado con más misterio, dándole un aire enigmático. Fue en el 4x09 "After", tras la caída de la cárcel, cuando Michonne quedó vagando sola de nuevo y la serie nos contó de manera tan creativa, a través de pesadillas que eran en parte recuerdos, cómo Michonne perdió a su hijo y castigó por ello a quienes deberían haberlo protegido. Pero es que cualquier escena con Michonne llorando vale su peso en oro...
<333
7) El abrazo entre Daryl y Carol
Nadie puede simplemente NO emocionarse con este momento y con todo lo que significa ese abrazo. No tenemos del todo claro de qué rollo van Daryl y Carol: algunos afirman que entre ellos se cuece algo romántico, otros sostienen que lo que les une es una gran amistad y no hay que buscarle más misterio, pero de una manera u otra su relación es uno de los aspectos más interesantes y emotivos de la serie.
8) Beth: El cordero se convierte en el lobo
Beth, al igual que primero Andrea y luego Carol, ha sido una mujer que ha vivido una evolución fascinante a lo largo de la serie. Ella también trató de suicidarse, algo que Andrea supo comprender muy bien, y más tarde se convirtió en toda una sorpresa - en algo que casi ninguno vimos venir. La perturbadora y tensa escena del hospital en que el policía trata de violarla simboliza a la perfección ese choque entre las dos Beths: la chica débil que parece, y la luchadora que en realidad es.
9) La merienda de Rick
Que Rick está más pa'llá que pa'cá es algo que se viene viendo desde hace temporadas. El encontronazo entre Rick y los compañeros de Daryl es probablemente la escena que mejor saca a relucir al entrañable psicópata que Rick alimenta en su interior. No deja de tener ironía que una de las escenas más brutales de toda la serie, por cierto, ni siquiera incluya zombis de por medio.
10) La conversación sobre maltrato entre Rick y Carol
Tal vez no es una escena que se calificaría como "espectacular", pero lo cierto es que este momento que podría pasar inadvertido para algunos fans a mí me causó mucha impresión. Rick y Carol están conversando en el porche de su casa sobre la vecina a quien su marido maltrata, y él pregunta a ella por qué se preocupa tanto.
Carol se siente identificada con la mujer, con las palizas y los gritos que le hacen recordar sus propios años de terror. Quiere ayudarla, liberarla, porque cree que, de no haber matado los caminantes a Ed, ella no estaría ahí. Y Rick, sin embargo, le responde que eso era irrelevante: que ella habría sobrevivido de todas formas. Y creo que no hay escena más profunda ni que mejor hable de quién es Carol, de esa fortaleza que siempre tuvo y que la ayudó a sobrevivir todos esos años de maltrato. El Apocalipsis no la inventó: tan solo la sacó a relucir.
*Bonus: Daryl haciendo volar bragas
Me estaré dejando muchísimos grandes momentos en el tintero, estos tan solo son algunos de mis favoritos. ¿Cuáles son los vuestros? ¡Sentiros libres de opinar en la sección de comentarios!
Isidro López (@Drolope)
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