1/2 Gestión de la energía en Edificios Administrativos: Sencillos consejos

ANTECEDENTES

En el anterior artículo ”La eficiencia energética en los colegios” describí el panorama de consumo energético en nuestros colegios.

La iluminación, calefacción y climatización alcanzan el 70% del gasto total energético en un centro cualquiera. Sólo en EE.UU. se gastan 22.600 millones de euros al año en abastecer energéticamente a sus colegios. No es una suma pequeña, que se puede extrapolar a otros edificios administrativos, como Ayuntamientos, Bibliotecas, Edificios de Oficinas, etc …

A continuación podrán leer una lista con sencillos consejos, mejoras y pautas de comportamiento para reducir el gasto energético en los centros. En un futuro artículo podrá leer otra serie de medidas para ejecutar en un medio-largo plazo. Muchas de las iniciativas, para el caso de los colegios, intentan involucrar a los alumnos.

La mayoría de estos consejos se pueden utilizar en otros edificios e instalaciones distintas a los centros educativos o administrativos.

SENCILLOS CONSEJOS

Estos consejos se centrarán, sobre todo, en conseguir que los usuarios tengan un correcto comportamiento y una utilización adecuada de los aparatos consumidores de energía. Siguiendo estos simples consejos podrán ahorrar hasta un 25%.

APAGADO DE LOS APARATOS

La forma más rápida de reducir los consumos es eliminar todos los innecesarios. Asegurarse que los equipos están apagados cuando no se están utilizando, es el primer paso. Revisen los equipos al acabar la jornada, evite que queden encendidos el resto del día, puede encargarse el personal de mantenimiento y limpieza o un grupo de estudiantes voluntarios. Los estudiantes pueden convertirse en los “embajadores de la eficiencia” y de un modo entusiasta encargarse de ciertas tareas. Recuerde que además de ayudar al centro, será un juego de asumir responsabilidades y, aprenderán una lección muy útil. No creo que haya ningún aparato que se le resista a los pequeños y que no puedan desconectar de forma segura. Les parecerá una actividad divertida. Algunos equipos no se pueden apagar, como alarmas, faxes, servidores, pero es muy posible que se puedan configurar para que cuando no se usen pasen a modo “ahorro”.

Los ordenadores, impresoras y copiadoras deben estar apagados cuando no se usan, también los fines de semana y periodos de vacaciones. Existen alargaderas con múltiples bases de enchufes que pueden ayudar al apagado de muchos equipos a la vez, ideal para los monitores. Además, existen sistemas inteligentes con sensores de ocupación (volumétricos) que pueden apagar automáticamente impresoras y fotocopiadoras cuando no están presentes los usuarios. Debería saber que un monitor de ordenador puede consumir dos tercios de la energía total de un equipo informático (PC, monitor e impresora), es importante que se configuren adecuadamente para que se pongan en modo de ahorro energético cuando no se usan. Esta sencilla medida puede ahorrar hasta 55€ por equipo al año.

Luces. Un correcto uso de iluminación es la manera más fácil de reducir el consumo de energía sin ninguna inversión importante. Simplemente apagando las luces en habitaciones desocupadas puede ahorrar entre el 8 y el 20% por de la energía destinada a la iluminación.

REGULACIÓN Y GESTIÓN DE LAS INSTALACIONES

Gestión de la temperatura. Si la temperatura no es controlada por un sistema de gestión de energía, un sencillo termostato programable puede aumentar el ahorro de energía y mejorar el confort. Realizando el ajuste automático de temperatura a niveles predeterminados. Minimizando la temperatura los fines de semana y festivos, del invierno, puede ahorrar mucho dinero. Dependiendo de su instalación puede que apagar la calefacción del todo durante los fines de semana haga que el consumo energético aumente. Dependerá de la inercia térmica del sistema. El suelo radiante necesita muchas horas para que coja temperatura el edificio, sin embargo una vez alcanzada mantenerla se realiza con un gasto mínimo.

Los calentadores de agua. Instale temporizadores para apagar los calentadores de agua eléctricos (termos) cuando se dejen de usar. Compruebe que el aislamiento de las tuberías es correcto, si no existe, haga que las aíslen. Su coste es muy bajo, y minimizará las pérdidas en este sentido.

Controles de iluminación. Son muy útiles para mantener los niveles lumínicos en los valores óptimos, sin derrochar. Instalar sensores de ocupación o detectores de presencia, controles de tiempo, reguladores de flujo luminoso ayuda a ahorrar energía, a reducir las horas de funcionamiento de las luminarias y, por consiguiente a minimizar los costos de mantenimiento. En los baños grandes, se deben instalar en el techo detectores de presencia, que enciendan las luces cuando entre alguien y se apaguen cuando pase un tiempo sin detectar presencia en la estancia. En los pasillos, una estrategia muy recomendable, es utilizar una combinación de regulación del flujo luminoso automática, además de los controles mediante sensores de ocupación después de las horas de clase. Los detectores de presencia son muy apropiados para almacenes y otras dependencias de poco uso, evitando, así los típicos olvidos que dejan las luces encendidas.

Control de las máquinas expendedoras. Utilice detectores de presencia para apagar las máquinas expendedoras. Si no es posible por el tipo de máquina, instale temporizadores que las apaguen cuando no se usan. Estas medidas pueden ahorrar el 50% de los consumos de éstas.

LIMPIEZA Y MANTENIMIENTO

La planificación regular de operaciones de mantenimiento y una revisión periódica de los elementos de las instalaciones, así como una limpieza de los mismos,  puede alargar la vida útil de los equipos y asegurar su funcionamiento correcto.

Envolventes y Cerramientos. Todas las puertas y ventanas deberían ser inspeccionadas periódicamente, para evitar que haya pérdidas térmicas por ellas. La reparación de las mismas ayudará a eliminar los derroches energéticos.

Iluminación. Limpiar periódicamente focos y lámparas con un paño seco eliminará la suciedad y polvo que impiden que rindan con los niveles de iluminación máximos de que son capaces. Los difusores de plástico que cubren la mayoría de las lámparas deben cambiarse periódicamente, ya que, con el tiempo, amarillean y se vuelven más opacos impidiendo una correcta emisión de la luz.

Aire acondicionado (AC). Muchos sistemas utilizan un economizador para aprovechar el aire frío exterior, así no hay necesidad de enfriarlo tanto mecánicamente. Programe revisiones periódicas, cada tres o seis meses, para que limpien y lubriquen las partes móviles, así el ecnomizador funcionará con mayor eficiencia.

Ventiladores. En los equipos de climatización y calefacción existen distintos ventiladores. Sus aspas, cojinetes y correas deben ser revisados al menos una vez al año para que funcionen correctamente. Durante la inspección, las aspas del ventilador deben ser limpiadas, los cojinetes deben ser lubricados adecuadamente y las correas deben adaptarse y modificarse si es necesario.

Filtros. Los filtros de aire se debe cambiar periódicamente de uno a tres meses. Si los equipos de Aire Acondicionado estuvieran próximos a carreteras u otros ambientes de alta polución, deberían sustituirse más a menudo. También cuando se usa el sistema del economizador, son necesarias más sutituciones en los filtros.

Fugas. Una fuga en uno de los equipos de climatización situados en la azotea puede costar 100€ al año en pérdidas.  Revise trimestralmente los equipos de climatización de las azoteas y sus conductos comprobando si hay fugas. Compruebe, también, que los sistemas de anclaje son seguros, que todos los tornillos están correctamente ajustados. Anualmente habrá que hacer una puesta a punto de los equipos de clima, sobre todo sus juntas, entradas y salida, teniendo especial cuidado, en el lado de la entrada de aire, donde la presión es mayor.

Las bobinas del condensador. Limpieza del serpentín del condensador es una de actuaciones de mantenimiento más rentable que se puede hacer en los sistemas de climatización. Una bobina encargada de elevar unos 10º la temperatura, cuando está sucia puede aumentar su consumo de energía en un 10% (Unos 95€ para una máquina de 10 toneladas trabajando 1.000 horas anuales). Para mantener estas bobinas funcionando correctamente hay que revisar trimestralmente que no están sucias y, limpiarlas cada año, justo antes del periodo de mayor uso del equipo.

Sistemas de agua caliente. Para mantener un rendimiento óptimo y evitar el despilfarro, los quemadores de gas o de gasoil y los calentadores de agua deben ser probados y ajustado anualmente. Los accesorios se deben lavar con agua caliente cada año, así se previene la proliferación de bacterias. Los aljibes y tanques de almacenamiento de agua deben ser purgados anualmente para eliminar los sedimentos, éstos reducen la eficiencia en los procesos de transmisión de calor.

Esta artículo continúa en: 2/2 Eficiencia y Gestión energética en Edificios Administrativos: Soluciones a largo plazo.

Imágenes:  [1] 

credit: ykanazawa1999

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