Vivir en un mundo conectado a veces nos da la falsa sensación de vivir en libertad. Pero ni el monitor de la computadora ni la pantalla de tu teléfono inteligente te protegen de las leyes que regulan la privacidad, seguridad o acoso, por supuesto, pero a veces las actividades relacionadas a la tecnología que considerabas legales, te pueden meter en problemas serios.
Cuando sacamos un dispositivo de su empaque, o descargamos una aplicación (app), muchas veces ni se nos ocurre leer la documentación que le acompaña, y sencillamente la descartamos o botamos. Y esas páginas pueden regresar para atormentarnos en una demanda si no se les presta la debida atención.
Los gobiernos y las compañías de tecnología a veces se enfrentan en las cortes legales, pero algunos usuarios de tecnología también han tenido que vérselas en juicios civiles o penales. Del lado de los usuarios se pueden encontrar organizaciones como la Fundación para la Frontera Electrónica, quien defiende , informa y asesora en asuntos que van desde los derechos del consumidor hasta la libertad de expresión. Y cuando la cosa se pone difícil, hasta hay que llamar a Amnistía Internacional para que entre en el equipo para proteger los derechos humanos.
A continuación algunos ejemplos de algunas situaciones que pueden llevarte a la cárcel, o al menos a un juicio.
01. Piensa antes de compartir un enlace
Hace unas semanas, el periodista y antiguo miembro de Anonymous, Barrett Brown, fue sentenciado a 63 meses de cárcel. Brown fue arrestado inicialmente por compartir el enlace a datos obtenidos al "hackear" la página de Stratfor, un contratista de Inteligencia, obstruyendo al FBI en la búsqueda de evidencias y al hacer afirmaciones amenazadoras acerca de un empleado federal en un video de YouTube que hizo luego de ser arrestada su señora madre, por conexiones con su investigación. El cargo principal fue por haber tenido acceso no autorizado a un servidor protegido.
02. Todos somos Charlie
Todos somos Charlie, excepto cuando no lo somos. Las demostraciones en el nombre de la libertad de expresión que se sucedieron luego del ataque terrorista en Paris no llegó a los oídos de las agencias del orden público. El comediante francés Diedonné compartió opiniones acerca de Israel y acerca de los judíos que lo llevaron a ser condenado por prácticas anti-semitas. Luego de los eventos acaecidos, publicó en Facebook "Esta noche, en lo que a mi concierne, me siento como Charlie Coulibaly", usando el apellido de la persona responsable por las matanzas en el mercado kosher. Dieudonné fue arrestado luego de ello.
03. Cuidado con las Selfies
Las varillas para tomar selfies, quiéranlo o no, se están poniendo de moda. Pero si las vendes en Corea del Sur, debes tener cuidado. Aquellos que vendan varillas para tomar selfies que no han sido probados y registradas por el gobierno, pueden ser encarcelados. Estas varillas usan Bluetooth, lo que las convierte en dispositivos de telecomunicaciones sujetas a regulaciones gubernamentales.
04. Liberar tu teléfono te puede quitar tu libertad
Liberar tu teléfono inteligente (rootearlo o rutearlo también son sinónimos) no es algo que se puede hacer en cualquier parte. Quizás pienses que puedes hacer lo que quieras con algo que es de tu propiedad, pero a veces eso no ocurre con los dispositivos electrónicos. En el 2010, la Oficina de Derechos de Autor determinó que liberar un teléfono inteligente es sólo permitido de acuerdo a lo establecido en el Tratado de Derechos Reservados Digital del Milenio. En el 2012 ratificaron la decisión, la cual debe ser reconsiderada cada tres años. Por ello, grupos como la Fundación para la Frontera Electrónica están luchando para que se exceptúe de ello a las tabletas también.
George Hotz fue demandado por la Sony, luego de "hackear" el PS3 y publicar la técnica empleada en su sitio web. Luego de varias negociaciones, ambos lados resolvieron un arreglo extra judicial, al firmar Hotz una caución permanente contra publicaciones futuras que vayan en detrimento de Sony. Hotz también es conocido por haber liberado muchos dispositivos electrónicos y publicar las claves de super usuario o " root " para ello. Hotz luego le donó $10.000 a la Fundación para la Frontera electrónica, quien asumió su defensa durante las demandas.
05. Libertad para tuitiar (tweet)
Hamza Kashgari,es un periodista de 23 años de Arabia Saudita, quien está en riesgo de ser sentenciado a muerte por atreverse a imaginarse una conversación entre él y Mahoma, donde se dirige a éste como si fuera un hombre mortal pero no como el profeta. Kashgari lo hizo a través del Twitter, y horas después de haber publicado sus tweets, los borró y empezó a pedir disculpas públicamente. Pero luego empezó a tener enemigos que pedían su muerte a través de una página de Facebook llamada "Sauditas que queremos castigo para Hamza Kashgari". Los comentarios fueron tan fuertes que Kashgari tuvo que huir a Malasia, donde fue extraditado de nuevo a Arabia Saudita, donde fue llevado detenido por 20 meses, y casi juzgado por apóstata, un crimen que se castiga con pena de muerte. Fue liberado luego de una campaña de opinión pública, y luego abrió otra cuenta en Twitter donde publicó inmediatamente: "Días de esperanza y de Espíritus inmortales. Oremos a Dios, cuya gracia es eterna".
06. Textear al ex
Enviarle mensajes de texto a tu ex normalmente no es una buena idea. Y si estás bravo, muy bravo, es peor. Un hombre francés, que había roto relaciones con su novia quería que ella le compensara por algunas reparaciones que ellos le habían hecho al apartamento que compartían. Por lo que le envió 21.807 mensajes. Un tiempo en prisión y un mediador impidieron que volviera a enviarle otro mensaje.
07. Con amigos como esos
¿Alguna vez has sufrido porque no te aceptan como amigos en Facebook? Parece ridículo, ¿no? Pero no lo es. Jelani Henry fue a prisión esencialmente por ser amigo en Facebook de miembros de la pandilla "Goodfellas", de Nueva York. En una redada de la Policía de Nueva York fue arrestado y llevado a prisión por haber aparecido en fotos de Facebook y en Videos de Youtube con amigos que eran miembros de la pandilla.
08. Cuidado con lo que hacen tus emojis
Los emojis son unas tiernas caricaturas que insertas en tus mensajes de texto y en tus publicaciones en las redes sociales. ¿No? No para un adolescente de Nueva York, quien fue arrestado por haber publicado en Facebook un mensaje que incluía emojis de pistola que apuntaban a emojis de policías. El adolescente, quien había tenido encuentros previos con la policía, tiene otras publicaciones que alientan la violencia contra la policía, la cual estaba en alerta luego de ataques llevados a cabo contra agentes de la policía previamente en la ciudad de Nueva York.
09. De regreso a la cárcel por un selfie
Tuviste un accidente de tránsito, mataste a tu amigo en él, vas a la cárcel por seis meses y cumples tu condena. ¿Qué es lo primero que haces al salir? Publicas una selfie acerca de qué bien te ves por haber perdido peso y haber hecho ejercicios durante tu encierro. Ryan Fye regresó a la cárcel por violar su libertad condicional al publicar en su Facebook una foto que señalaba los beneficios de su rutina de ejercicios en la cárcel y expresaba su odio hacia sus cuidadores.
10. Liberen a Shi
El periodista chino Shi Tao cumplió 8 años y 6 meses en prisión. ¿Su crimen? Enviarle a la Fundación Democracia Asiática (en los EEUU) un documento del Partido Comunista donde se ordenaba que no se le diera cobertura a los disidentes que estaban regresando a China para celebrar el 15 aniversario de los eventos de la Plaza Tiananmen. La evidencia contra Shi fue su propio correo, entregado al Gobierno Chino por Yahoo!, quien dijo estar cumpliendo las leyes locales. El gobierno le condenó por "proveer ilegalmente secretos de Estado a entidades extranjeras". La esposa de Shi fue acosada y obligada por funcionarios para que se divorciara de él. Su madre, su tío y su hermano también sufrieron acoso y vigilancia.
Por otro lado, Wang Xiaoning fue enviado a prisión por circunstancias similares.
Yahoo! fue demandada y llegó a un arreglo con las familias en el 2007. El arreglo incluyó la creación de un fondo para "proveer ayuda legal y humanitaria a los disidentes que han sido encarcelados por expresar en línea sus puntos de vista".
11. La canción de Jammie Thomas-Rasset
Jammie Thomas-Rasset fue acusada de compartir 24 canciones en línea, y el costo del crimen escaló desde $54.000 hasta $1,92 millones a través del largo juicio. Al final la Corte Suprema se rehusó a escuchar el caso y dejó a Jammie con una deuda de $222.000.
12. El derecho a nombres de dominio
Los estadounidenses creen que en las leyes se aplica el dicho de "inocente hasta que se demuestre lo contrario", pero no siempre es así. Algunos nombres de dominio en internet han sido bloqueados y decomisados por autoridades de Inmigración y Aduanas, bajo la excusa de "confiscación de bienes". Las confiscaciones no necesitan de una sentencia firme para cumplirse, y no hay transparencia, más allá de quién hizo la observación acerca del sitio en cuestión. Los sitios confiscados incluyen sitios con torrents, sitios que vendían artículos cuyos dueños registrados señalaron que eran falsificados o revendidos ilegalmente, o que eran motores de búsqueda. La página de hip hop http://dajaz1.com fue confiscada, y regresada luego de una batalla legal, por mostrar contenido con derecho de autor, enviado directamente por las compañías disqueras.
Traducido por Luis Castellanos de publicación en PC MagFollow Me: