La elección de los acusados fue política. Dos de ellos ni siquiera estuvieron en la manifestación de Haymarket, otros se habían retirado antes de la explosión. Lo que estaba en juicio eran las ideas políticas de estos sindicalistas, cosa que fue dicha explícitamente por la acusación en varios tramos del juicio, plagado de vicios legales, falta de garantías, testigos falsos y demás catálogo de violencias y trampas a que fueron sometidos los compañeros. La índole fraudulenta del juicio fue tan evidente que, aun en medio de una ensordecedora campaña nacionalista contra los "terroristas extranjeros" (ya que muchos obreros eran inmigrantes), el jurado no se atrevió a condenar a muerte a todos los acusados, como era la intención primera de los organizadores del juicio. Años más tarde el gobernador Altgeld afirmó que el juicio que los condenó se caracterizó por "la histeria", lo que estaba en juicio eran las idean anarquistas y se esperaba que "con la muerte de estos militantes murieran dichas ideas".
El 11 de noviembre de 1887 Spies, Engel, Fischer y Parsons fueron ahorcados. Unos días antes Louis Lingg se había quitado la vida en su celda. A partir de ese momento fueron conocidos como los "Mártires de Chicago" y considerados "héroes" de la clase trabajadora. En su funeral asistieron más de 25.000 trabajadores. Los otros compañeros (Fielden, Schwab y Neebe) pasaron largos años en prisión hasta que el peso de las mentiras acumuladas obligó a una revisión del proceso que concluyó con la libertad de los tres sobrevivientes. El 26 de junio 1893 el gobernador Altgeld los puso en libertad y dejó en claro eran inocentes del delito por el que habían sido juzgado: "ellos y los ahorcados fueron las víctimas de la histeria, de jurados tendenciosos y de un juez sesgado".
Dos años después, en julio de 1889, la Segunda Internacional reunida en París resolvió que “Se organizará una gran manifestación en fecha fija, de tal manera que simultáneamente en todos los países y en todas las ciudades en el mismo día convenido, los trabajadores pedirán a las autoridades oficiales la reducción, mediante una ley, de la jornada de trabajo a 8 horas... En vista que una manifestación análoga ha sido aprobada para el 1º de Mayo de 1890 por la Federación Americana del Trabajo, en su Congreso celebrado en Saint Louis... se adopta esa fecha para la manifestación internacional”.
Relato de la ejecución por José Martí, corresponsal en Chicago del periódico La Nación de Buenos Aires:
...salen de sus celdas. Se dan la mano, sonríen. Les leen la sentencia, les sujetan las manos por la espalda con esposas, les ciñen los brazos al cuerpo con una faja de cuero y les ponen una mortaja blanca como la túnica de los catecúmenos cristianos. Abajo está la concurrencia, sentada en hilera de sillas delante del cadalso como en un teatro... Firmeza en el rostro de Fischer, plegaria en el de Spies, orgullo en el del Parsons, Engel hace un chiste a propósito de su capucha, Spies grita: "la voz que vais a sofocar será más poderosa en el futuro que cuantas palabras pudiera yo decir ahora». Les bajan las capuchas, luego una seña, un ruido, la trampa cede, los cuatro cuerpos caen y se balancean en una danza espantable... José Martí
Material elaborado por la docente gracias al aporte de: "Historia del Mundo Contemporáneo" de Antonio Fernández, Ed. Vicen Vives http://argentina.indymedia.org/
http://libcom.org

Placa conmemorativa del gobierno de Chicago dedicada a los trabajadores
involucrados en el incidente de Haymarket, los mártires de Chicago.
En rotulador,"Primero tomaron vuestras vidas, ahora explotan vuestra memoria".
creartehistoria
