Como todos sabeís, John Lennon era asesinado el 8 de diciembre de 1980 a las puertas del edificio Dakota de New York -donde el propio ex-Beatle residía- a manos de Mark David Chapman. El desequilibrado fan, que horas antes le había pedido un autógrafo, disparó hasta en cinco ocasiones a quemarropa y por la espalda a Lennon cuando éste y su mujer, Yoko Ono, regresaban a casa diez minutos antes de las once de la noche. Lennon llegó muerto al hospital St. Luke´s Roosevelt, donde fue trasladado en ambulancia. De ese modo fallecía ese artista trascendental, uno de los grandes de la música sin ninguna duda, que dejó al morir un impresionante legado artístico tanto formando parte de The Beatles como en solitario. Hoy se cumplen 31 largos años desde la muerte del Beatle más grande de todos, y esta canción es un pequeño homenaje a tan legendario músico.
Casualidades de la vida, el mismo día pero 24 años más tarde -un 8 de diciembre de 2004- era asesinado Dimebag Darrell, miembro fundador de la mítica banda Pantera y uno de los mejores guitarristas de la historia del metal. Darell estaba actuando junto a su nuevo grupo, Damegeplan, en el club Alrosa Villa de Columbus, en Ohio, cuando Nathan Gale, de 25 años de edad, subió al escenario para disparar en 15 ocasiones el arma que portaba y asesinar así a cuatro personas, entre las cuales se encontraba Dimebag Darrell, que murió en el acto. El asesino, esquizofrénico y con serios problemas mentales, fue abatido por la policia. Todavía hoy somos muchos los que nos preguntamos cómo una persona enferma puede ser poseedora de un arma y, lo que es más grave aún, introducirla sin que nadie lo evitara en un concierto. Una vez más, un genio caía a manos de un loco. Dimebag, descansa allá donde estés. Por suerte tuviste tiempo de dejarnos una herencia de valor incalculable: tu talento...