35 años sin tí

Tenía yo 14 años más o menos, mi padre me lo anunció por la mañana, él ya lo había escuchado en el parte de todos los días. En Salesianos el cura nos dió un espiche a la entrada sobre lo bueno que había sido Franco y más tarde, después de una misa, nos dejaron ir para casa, creo, esto último se me borra ya de mi memoria. La verdad es que todos teníamos la ilusión de un Mundo mejor. Evidentemente España ha cambiado de forma radical, pero hemos perdido la esperanza en el cambio que nosotros imaginábamos. Algunos que se llaman intelectuales alardean de pederastia, la derecha está peor que nunca, con jueguecitos que matan a personas por el simple hecho de haber nacido en la peor parte del Mundo, se ha confundido de la forma más soez la descentralización del Estado con la democracia, habiéndonos quedado en una ambigüedad manifiesta entre un Estado Federal y un Estado Centralizado, así aparecen los políticos de feria que confunden la pertenencia a una cultura común con una batalla por absurdas competencias. Seguimos con las Diputaciones y hemos multiplicado la burocracia de la Administración. En política, la Socialdemocracia, que en Europa se restringe a cuatro Estados, se esconde trás el "no puedo hacer otra cosa" o "son los designios que nos marca Bruselas". El Fondo Monetario Internacional se ha convertido en el Caudillo del Mundo por la gracia de Dios, solo le falta la guardia mora, que quizás sean los que estos días se han reunido en Lisboa para hacerle la ola a los banqueros y empresarios a los que, con Franco o sin él, siempre les ha ido bien. Los derechos sociales que se tenían en la paternal España de los años sesenta se han perdido en muchos casos: se trabaja en Domingo, se trabaja a cualquier hora, se trabaja sin regulación,... No creo que los Marcelino Camacho, Enrique Tierno o Ramón Rubial pensaran que esta iba a ser la España 35 años después. Y lo peor de todo es que gobiernan "los nuestros" (¡cuerpo a tierra!). Sean felices que es sabadete. Salud.