Autor: Torcuato Tasso. Si uno busca exactamente el término “prohibido” en Google, hallará más de 23 millones de resultados. Una barbaridad, por más que muchas de entre tal cantidad de “prohibiciones”, sean solo producto de la aplicación sensata de un mínimo razonable código ético y moral.Entre lo prohibido hay de todo, y no por todos compartido con el mismo criterio y visión. El concepto de lo que es admisible o reprobable es muchas veces individual, más allá de lo que universalmente se interpreta que nunca se ha de hacer y que se podría reducir a solo una idea básica: cualquier cosa que dañe a otros.Lo peor es que entre los millones de resultados que arroja el buscador se encuentra también aquello que nos prohibimos a nosotros mismos hacer o afrontar. La autocensura resulta dañina, porque limita nuestras capacidades y nos obliga a permanecer en un redil concreto por miedo, por ejemplo, al qué dirán. Hay veces que percibimos muy claramente que debemos hacer algo, pero enseguida esa voz crítica latente a la que damos tanto crédito nos dice: ¡Eh, cuidado, reprímete, no lo hagas porque pensarán que estás loco! o ¡Ni lo intentes, porque fracasarás! Y nos lo prohibimos, y pasado el tiempo y volviendo la vista atrás, comprobamos que el temor era infundado y nos lamentamos, sin solución, por no haberlo hechoSi algo es lícito prohibirse es lo que sigue a continuación, porque vedarnos todo esto quizá sea la mejor garantía de una vida plena y feliz.¡QUEDA PROHIBIDO!
Queda prohibido llorar sin aprender, levantarte un día sin saber qué hacer, tener miedo a tus recuerdos. Queda prohibido no sonreír a los problemas, no luchar por lo que quieres, abandonarlo todo por miedo, no convertir en realidad tus sueños. Queda prohibido no demostrar tu amor, hacer que alguien pague tus deudas y el mal humor. Queda prohibido dejar a tus amigos,no intentar comprender lo que vivieron juntos, llamarles solo cuando los necesitas. Queda prohibido no ser tú ante la gente, fingir ante las personas que no te importan, hacerte el gracioso con tal de que te recuerden, olvidar a toda la gente que te quiere. Queda prohibido no hacer las cosas por ti mismo, tener miedo a la vida y a sus compromisos, no vivir cada día como si fuera un último suspiro. Queda prohibido echar a alguien de menos sin alegrarte, olvidar sus ojos, su risa, todo porque sus caminos han dejado de abrazarse, olvidar su pasado y pagarlo con su presente. Queda prohibido no intentar comprender a las personas, pensar que sus vidas valen mas que la tuya, no saber que cada uno tiene su camino y su dicha. Queda prohibido no crear tu historia, no tener un momento para la gente que te necesita, no comprender que lo que la vida te da, también te lo quita. Queda prohibido no buscar tu felicidad, no vivir tu vida con una actitud positiva, no pensar en que podemos ser mejores, no sentir que sin ti este mundo no sería igual.
Revista Coaching
Sus últimos artículos
-
Todas las tiendas donde se venden los libros de Frases para cambiar Ediciones a nivel mundial
-
Enlaces de las tiendas donde se vende «Frases para cambiar tu vida 2»
-
Un maravilloso cuento sobre cómo alcanzar la felicidad
-
672.- "Es difícil hacer a un hombre miserable mientras sienta que es digno de sí mismo"
