La jardinería es mucho más que el arte de crear espacios y acompañar a la arquitectura. También se utiliza como terapia para aumentar la autoestima, trabajar la concentración y la motivación, y como mejora de algunas funciones físicas y motoras.
Si estás pensando en construir tu propio jardín, te animamos a ello. No necesitas un gran terreno, pues hay infinidad de variedades que se adaptarán a tu espacio. Lo fundamental es tener la ilusión por comenzar y una formación básica para iniciarse.
- Estudia el espacio. Piensa dónde quieres que esté tu jardín. Ten en cuenta el clima, las horas de sol y el tipo de tierra para decidir qué planta te conviene.
- Diseña. Piensa en cómo quieres que sea tu jardín: de qué estilo, color y forma.
- Déjate asesorar por un especialista. Pregunta las características de cada planta y la época de siembra.
- Riega y busca el equilibrio. No lo dejes marchitar ni que se ahogue.
- Ten paciencia: la clave del éxito de un jardín es la constancia.
Pon a prueba tu creatividad. Disfruta de alimentos frescos y saludables. Consigue llevar lo natural a un espacio de tu casa. Favorece tu salud. Te sorprenderás de los beneficios que la jardinería puede aportarte.
"No hay mejor forma para preservar la salud que pasar el tiempo libre en el jardín". Leonard Maeger.
Curso relacionado: Jardinería práctica.
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