En las entrevistas de trabajo todo se tiene en cuenta. Pero no por eso, uno debe obsesionarse, si no que debe asumir que es un proceso durante el cual te tienes que dar a conocer de la mejor forma posible, y para ello es necesario que te prepares.
Hay errores graves y otros que no lo son tanto, al igual que cada empresa o entrevista puede ser muy distinta a las demás. Pero en general, hay errores que nunca deberías cometer en una entrevista de trabajo, y son esos los que veremos a continuación.
Investigar a la empresa y el puesto de trabajo al que te presentas, es uno de los primeros pasos que debe tomar cualquier candidato. Si te saltas ese paso, te verás muy limitado a la hora de hablar con el reclutador y se notará mucho que te has presentado a ese puesto, como podrías haberte presentado a cualquier otro.
Cuando investigas, estás aprendiendo cosas sobre la empresa y tu futuro puesto de trabajo. Eso significa que el día de la entrevista podrás hablar con propiedad y hacer preguntas relevantes a tu entrevistador, y te aseguro que eso deja muy buena sensación.
Echa un vistazo:76 Preguntas y respuestas de una entrevista de trabajo
Cuando no llegas a la hora concertada o lo haces en compañía de alguien, estas demostrando que aun no eres una persona lo suficientemente madura.
A una entrevista siempre debes llegar solo y con 5 o 10 minutos de antelación, eso te permite hablar con otros candidatos, quizás sacarle algo de información a la secretaria o recepcionista. Pero sobre todo te aseguras de estar a tu hora, y tener el tiempo suficiente como para hacerte con el lugar y calmar los nervios.
Si tu mismo no muestras interés por el puesto de trabajo al que estas optando, te aseguro que el entrevistador va a perder todo su interés por ti y tu candidatura.
Cuando acudes a una entrevista lo primero que tienes que demostrar es que te interesa ese puesto, que te gusta la empresa, que la conoces y que te sientes ilusionado por la posibilidad de empezar a trabajar allí.
Mucha gente termina olvidándose de que le están haciendo una entrevista y empieza a tomarse demasiadas confianzas. Es sin duda un error que suele cometerse cuando te has enfrentado a pocas entrevistas, o cuando el proceso de selección se alarga más de lo normal.
En el caso de las entrevistas abiertas, donde nos dejan responder con mayor libertad, hay que tener un especial cuidado y siempre tratar de seguir el guión que nos hayamos preparado en casa. No vale dejarse ir y hablar más de la cuenta, eso nunca es positivo para el candidato.
Cuando hablas mal de tu empresa, tu anterior jefe o tus compañeros. Das la imagen de ser alguien conflictivo, que como poco terminó por hacerse enemigos y que no eres de fiar, ya que estás traicionando la confianza de tu anterior empresa, contándole tus dramas a alguien que realmente no conoces.
Al hablar mal de alguien demuestras resentimiento y en cualquier caso, dejas ver que no has terminado de superarlo, por lo que podría distraerte en este nuevo trabajo.
Técnico Superior en Sistemas de Telecomunicación e Informáticos, pero mi mayor pasión es todo lo relacionado con Internet, y especialmente con los blogs.
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