578.- "El hombre que mantiene su ser siempre en calma e imperturbable a pesar de las tormentas, tiene la conducta y la actitud ideales en la vida'

Autor: Jefe Potawatomi"En las largas noches de invierno, los cazadores indios se reunían alrededor del fuego para escuchar las tradiciones históricas, leyendas y cuentos de hadas que les habían contado sus padres y los padres de sus padres..."
Esta semana vamos a dedicar las entradas del blog a la profunda espiritualidad de los indios nativos norteamericanos, cuyas creencias -originales, ricas y variadas- han subsistido hasta hoy en día.
Para empezar, subrayemos el enorme respeto que los indios sentían por la naturaleza, lo que explicaba sus constantes ofrendas y referencias a la ‘Madre Tierra’. Ellos pensaban que la Tierra poseía alma y, por tanto, todo en ella era sagrado; los árboles, las montañas, el agua o el viento, eran seres con vida y conciencia propia.
Sus ritos y ceremonias debían de estar acompasados con las fuerzas de la naturaleza, tales como la lluvia, el sol o cualquier otro fenómeno natural. De especial importancia en sus costumbres y creencias eran los animales, a los que profesaban una profunda admiración y valoraban en su condición de esenciales para su propia supervivencia. En materia divina, todas las tribus compartían la idea de un "Gran Espíritu" creador, aunque en cada pueblo se le otorgaba un nombre diferente.
Igualmente, y ya para terminar esta primera parte, los indios nativos norteamericanos disponían de una especie de 'Código ético tradicional', que les permitía vivir en paz con el resto de los seres vivos y de acuerdo al espíritu del creador de todo su mundo. Aquel Código, era este…
1.- Cada mañana al levantarte y cada noche antes de dormir, da gracias por la vida dentro de ti, por las cosas buenas que el Creador te ha dado y por la oportunidad de crecer un poco más cada día. Ten en cuenta tus pensamientos y acciones del día anterior y busca el valor y la fuerza para ser una mejor persona. Busca las cosas que beneficiarán a otros (todos).
2.- Respeto. El respeto significa "sentir o mostrar honor y aprecio por alguien o algo, considerar el bienestar de alguien, o tratar a alguien o algo con deferencia o cortesía". Mostrar respeto es una ley básica de la vida.

• a. Tratar a cada persona, desde el más pequeño al más grande, con respeto en todo momento.
• b. Debe prestarse especial atención a los ancianos, padres, maestros y líderes comunitarios.
• c. Ninguna persona debe tener la sensación de haber sido herida por ti.
• d. No tocar nada de lo que pertenece a otra persona (especialmente los objetos sagrados) sin permiso, o un entendimiento entre los dos.
• e. Respetar la privacidad de cada persona, nunca entrometerse en los momentos de tranquilidad de una persona o en su espacio personal.
• f. Nunca caminar entre las personas que están conversando.
• g. Nunca interrumpir a las personas que están conversando.
• h. Hablar en voz baja, sobre todo cuando se está en presencia de los ancianos, extranjeros u otros a quienes se debe especial respeto.
• i. No hablar a menos que se te invite a hacerlo en las reuniones donde los ancianos están presentes (excepto para preguntar qué se espera de ti).
• j. No hablar de los demás de una manera negativa, si están presentes o no.
• k. Tratar la Tierra y todos sus aspectos, como a tu madre. Mostrar un profundo respeto por el mundo mineral, el mundo vegetal, y el mundo animal. No hacer nada para contaminar a nuestra madre, y levantarte con sabiduría para defenderla.
• l. Mostrar un profundo respeto por las creencias y religión de los demás.
• m. Escuchar con cortesía lo que otros dicen, incluso si sientes que lo que están diciendo es inútil. Escucha con tu corazón.
• n. Respeta la sabiduría de la gente en el Consejo. El respeto exige que escuches con atención las ideas de otros y no insistir en que tu idea prevalezca. El choque de ideas produce la chispa de la verdad. Una vez que el Consejo ha decidido algo en la unidad, exige el respeto de que nadie hable en secreto en contra de lo que se ha decidido. Si el Consejo ha cometido un error, ese error se hará evidente para todos los miembros en su momento.

3.- Sé sincero en todo momento y bajo todas las condiciones.
4.- Siempre trata a sus invitados con honor y consideración. Da la mejor comida, las mejores mantas, la mejor parte de su casa, y tu mejor servicio, a tus huéspedes.
5.- El dolor de uno es el dolor de todos; el honor de uno es el honor de todos.
6.- Recibe los extraños y forasteros con un corazón amoroso y como miembros de la familia humana.
7.- Todas las razas y las tribus en el mundo son como las flores de diferentes colores de un prado. Todas son hermosas. Como hijos del Creador, todos deben ser respetados.
8.- Sirve a los demás. Ser de alguna utilidad para la familia, la comunidad, la nación y el mundo, es uno de los principales propósitos para los cuales los seres humanos han sido creados. La verdadera felicidad no viene sino para aquellos que dedican su vida al servicio de los demás.
9.- Observar la moderación y el equilibrio en todas las cosas.
10.- Conocer lo que conduce a tu bienestar y lo que conduce a su destrucción.
11.- Escucha y sigue la orientación dada a tu corazón. Espera la orientación y procura estar atento ya que puede venir en muchas formas: en la oración, en los sueños, en los momentos de soledad, en silencio, y en las palabras y los hechos de los ancianos sabios y amigos.