Revista Cultura y Ocio

6 datos interesantes sobre Fidel Castro

Por Jossorio

6 datos interesantes sobre Fidel Castro

ESCRITO POR: Jeff Wallenfeldt

Fidel Castro , el padre de la Revolución cubana , gobernó su país durante 47 años, de 1959 a 2006. En comparación, durante ese mismo período, 10 hombres sirvieron como presidente de los Estados Unidos: Dwight Eisenhower , John F. Kennedy , Lyndon. B. Johnson , Richard Nixon , Gerald Ford , Jimmy Carter , Ronald Reagan , George HW Bush ,
Bill Clinton y George W. Bush . Para algunas personas, Castro era un dictador despiadado y un comunistatirano. Para otros, fue un libertador y un firme defensor del igualitarismo. Sin lugar a dudas, fue una de las personas más reconocibles en el mundo en la segunda mitad del siglo 20 y el comienzo del siglo XXI. Él es recordado por una serie de características, roles y asociaciones. Éstos son algunos de ellos.

Antes de ser vilipendiado por los políticos estadounidenses y los medios de comunicación masivos, Castro fue celebrado como un héroe por haber derrocado al régimen autoritario de Fulgencio Batista. En el resplandor inmediato de la triunfante Revolución cubana, Ed Sullivan , presentador del programa de variedades "realmente grande" más popular de la televisión estadounidense, voló a Cuba para grabar una entrevista con Castro. En Matanzas a las 2:00 AM del 11 de enero de 1959, rodeado por unos 100 hombres armados, Sullivan habló con Castro, a quien comparó con George Washington . Llamó a Castro un "buen hombre", empleando los mismos adjetivos que había usado para describir a Elvis Presley y que utilizaría para referirse a los Beatles.. Más tarde ese mismo día, en La Habana , Castro grabó una aparición para el programa de noticias de televisión Face the Nation . Habló con vacilación pero aseguró inglés, como lo haría cuando apareciera como invitado en The Tonight Show presentado por Jack Paar , que viajó a La Habana para entrevistar a "El Comandante". Los reporteros que lo interrogaron en Meet the Press (19 de abril, 1959) lo llamó Dr. Castro, adoptando el honorífico convencional cubano para un abogado (doctor en jurisprudencia). En esa ocasión, Castro, que aún no se había declarado marxista , dijo que creía que el pueblo estadounidense era "agradable".

Abraham Lincoln tenía una barba famosa. Lo mismo hicieron Walt Whitman y Karl Marx . Aún así, es difícil pensar en una barba más famosa que la que usó Castro en siete décadas. Al igual que sus compañeros revolucionarios, tuvo pocas oportunidades de afeitarse mientras operaba en las tierras salvajes de Sierra Maestra . Las barbas crecidas de los hombres se convirtieron en insignias de honor. Ese vello facial también actuaba como un filtro para los espías, que, como señaló Castro en su autobiografía, Fidel Castro: My Life , habría tenido que cultivar seis meses de crecimiento incluso antes de intentar infiltrarse en el Movimiento 26 de Julio. Mucho tiempo después de su guerrilladías, Castro mantuvo su barba como un símbolo del triunfo de la revolución. Su barba se convirtió en un símbolo tan potente que la Agencia Central de Inteligencia de EE. UU. Tramó (pero nunca llevó a cabo) un plan para hacerlo caer plantando en los zapatos de Castro un depilatorio soluble que podría absorberse fácilmente a través de la piel. Pragmáticamente, Castro pensó que saltarse el afeitado le ahorraba tiempo para usarlo de manera más productiva. Según su cálculo, "si multiplicas los quince minutos que pasas afeitándote todos los días por el número de días en un año, verás que dedicas casi 5.500 minutos a afeitarte. Un día de trabajo de ocho horas consiste en 480 minutos, así que si no te afeitas, ganas alrededor de 10 días que puedes dedicar al trabajo, a la lectura, al deporte, a lo que quieras ". (De hecho, las matemáticas funcionan a alrededor de 11 días)

El asesinato de los personajes fue el objetivo de la conspiración para depilar la cara de Castro, pero a través de los años, las agencias de inteligencia estadounidenses también formularon muchas conspiraciones abortadas o fallidas para quitarle la vida a Castro. Aunque es cuestionable si emprendieron los 634 intentos de asesinar a Castro que fueron reclamados por Fabián Escalante, el ex jefe del Departamento de Seguridad del Estado cubano, hay abundantes pruebas de conspiraciones del gobierno de Estados Unidos para asesinar a Castro. Algunos de ellos eran muy extraños de hecho. Dos de los más extraños giraban en torno a la pasión de Castro por el buceo: uno pidió que se plantara una concha marina explosiva en un área donde le gustaba bucear, y el otro involucró un traje mojado contaminado con un hongo causante de enfermedades y un aparato respiratorio antituberculoso que se le debía administrar. Otros instrumentos propuestos de muerte incluyen una pluma estilográfica que ocultaba una aguja hipodérmica tan fina que ser apuñalado por sería indetectable, botulismo píldoras de toxina a ser administrados a Castro por un ex amante, y ambos envenenados y la explosión de cigarros.

No es sorprendente que los cigarros parecieran una buena forma de llegar a Castro. Durante décadas, un cigarro que sobresalía de su boca era casi una firma para él, al igual que su uniforme de fatiga (otro vestigio guerrillero) y barba. Cuba, por supuesto, es famosa por el arte de su cigarropor lo que es natural que Castro celebre ese logro nacional haciéndolo parte de su imagen. Lo que es sorprendente es su papel en el desarrollo de una de las marcas de cigarros más famosas de la isla. A principios de la década de 1960, después de enterarse de que el cigarro especialmente aromático fumado por uno de sus guardaespaldas fue hecho por el amigo del guardaespaldas, Castro instaló la fábrica El Laguito para que lo fabricara. El Cohiba Espléndidos resultante se convirtió en una marca de fama mundial y en el cigarro de elección de Castro durante más de 20 años. En 1985, sin embargo, su puntal omnipresente desapareció. Habiéndose convertido en un fumador de cigarros a la edad de 15 años, Castro dejó de fumar a los 59 años para apoyar una campaña nacional contra el tabaquismo orientada a la salud.

Lector ávido y amante de la literatura, Castro tuvo relaciones con tres escritores ganadores del Premio Nobel . Citó la novela de América Ernest Hemingway Por quién doblan las campanas , sobre la Guerra Civil española , como inspiración para sus tácticas de guerrilla. La proliferación de fotos de Castro con Hemingway, que tuvo un hogar famoso en Cuba, dio la impresión de una estrecha amistad entre los dos hombres. En verdad, todas las fotos vinieron de un solo encuentro en mayo de 1960 cuando Castro asistió a un concurso de pesca celebrado en honor de Hemingway. Poeta chileno Pablo Nerudatenía un gran respeto por la Revolución cubana y Castro, aunque se sorprendió por el trato rudo de Castro a un fotógrafo que se encontró con una reunión secreta entre los dos hombres en Caracas . Más tarde, Neruda se convirtió en objeto de desprecio en una carta pública de intelectuales cubanos, supuestamente escrita a instancias de Castro, después de que el poeta visitara los Estados Unidos en 1966. La relación de Castro con el novelista colombiano Gabriel García Márquezera de una calidad completamente diferente. Los dos estaban realmente cerca. A principios de la era posrevolucionaria, el autor trabajó para una oficina de prensa del gobierno cubano antes de que los comunistas lo tomaran. La compleja amistad de los hombres surgió de la reverencia de Castro por el clásico realista mágico de García MárquezCien años de soledad . Continuó para sobrevivir la mezcla del novelista de apoyo y condena del régimen de Castro. García Márquez consideraba que Castro tenía una sensibilidad literaria especialmente refinada y penetrante, y, durante años, a pedido del autor, Castro leyó y criticó sus manuscritos.

De acuerdo con una leyenda largamente perpetuada, Castro era un lanzador de tiro duro que llamó la atención de los cazatalentos de Grandes Ligas . En una versión completamente ficticia, inventada por Don Hoak, un oficial de grandes ligas, Hoak estuvo al bate en un juego de la Liga Cubana que fue interrumpido por manifestantes estudiantiles anti-Batista. Entre ellos se encontraba Castro, quien tomó el montículo y lanzó varias rápidas pero alocadas bolas rápidas que Hoak luchó para cometer una falta. Otra versión de la leyenda gira en torno a los senadores de WashingtonEl explorador Joe Cambria busca al prospecto de pitcheo Castro pero no está lo suficientemente impresionado como para ficharlo. Si el "calentador" de Castro tuviera un poco más de empuje, según la historia, tal vez nunca hubo una revolución cubana. En verdad, Castro fue un consumado atleta de secundaria que fue nombrado deportista escolar excepcional de La Habana en 1943-44. Destacó en atletismo (en salto de altura y carrera de media distancia), baloncesto (jugando para el equipo de primer año de la Universidad de La Habana) y tenis de mesa. Además, lanzó para su equipo de béisbol de la escuela secundaria en su último año. Según los informes, sí apareció, sin haber sido invitado, en dos de las pruebas celebradas por Cambria, pero no se distinguió.

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