Son muchos los frenos que podemos ponernos ante la idea de iniciar un proceso de coaching por el temor que surge ante lo desconocido o por la inseguridad que puede producir abrir el corazón ante un coach. Lo cierto es que la experiencia de hacer un proceso de coaching puede ser muy interesante y constructiva puesto que ofrece grandes beneficios.
¿Cuáles son las razones para invertir tu tiempo en un proceso de coaching?
- Existe un compromiso que nunca debes perder de vista: es aquel que mantienes contigo mismo en la responsabilidad por tu propia felicidad. A veces, perdemos la perspectiva del lugar en el que estamos y nos alejamos del punto e2n el que queremos estar. Un proceso de coaching te permite elaborar un plan de acción para alcanzar tu objetivo.
- El poder de las preguntas es vital para pensar y reflexionar. De hecho, la filosofía, una de las ciencias más importantes, muestra el valor que tiene la pregunta como principio de reflexión. El coaching también comparte esta esencia socrática. Las preguntas del coach te ayudarán a encontrar tus propias respuestas. El coach no te da las soluciones que buscas sino que es un facilitador para que tú encuentres las respuestas en tu interior. La palabra es terapéutica, por tanto, en el contexto de un proceso de coaching también contamos con las circunstancias adecuadas para poner nuestras ideas en orden.
- Tendemos a vivir tan deprisa en medio de tantas ocupaciones cotidianas que frecuentemente tenemos la sensación de que no tenemos tiempo ni para pensar. Un proceso de coaching permite al cliente encontrar un tiempo para sí mismo.
- Crecemos como personas en la medida en que salimos de la zona de confort e integramos nuevas experiencias en nuestra vida. Vivencias que constituyen un aprendizaje y que nos permiten ampliar nuestro mapa del mundo. Hacer un proceso de coaching es dar un salto en positivo hacia ese desarrollo personal que desde un punto de vista potencial, es inherente a la voluntad.
- El coste de un proceso de coaching es una inversión de autoconocimiento. Y existen momentos de nuestra vida en los que podemos sentir que realmente nos compensa esa inversión por los beneficios que nos ofrece.
- Un proceso de coaching es una iniciativa que te permite cuidar de ti al darte la importancia que realmente mereces y al no poner en una lista de espera tus objetivos y expectativas. Esto es sinónimo de cuidar la autoestima y el amor propio.
Hacer un proceso de coaching es una decisión personal que cada cliente debe de valorar. En este artículo, he enumerado seis razones que pueden ser valiosas para aquellos que, como tu, se están planteando esta posibilidad y tengan dudas de dar el paso.
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Maite Nicuesa para 3Contigo Coaching.
Coaching personal, profesional y para la salud en Madrid y Figueras.