Hay muchas razones por las que Jordania se convierte en un destino a tener muy en cuenta. Una de ellas es que tiene una buena red de carreteras principal que permite recorrer el país con comodidad, ya sea por libre o en grupo. Otra muy buena razón es que Jordania es el país más estable, seguro y progresista de todo Oriente Medio.Pero la más importante es que ofrece tres de los destinos más atractivos y únicos del mundo: la fascinante "Petra", una de las siete maravillas de mundo, el sorprendente y a la vez divertido "Mar Muerto" y el hermoso y espectacular desierto rojo del "Wadi Rum". Todo un sueño para los amantes de los misterios y los tesoros de la antigüedad.
En nuestro viaje recorremos el país de norte a sur. Nabateos, ammonitas, romanos o bizantinos lo hicieron antes que nosotros y vamos a recorrer un buen número de kilómetros desde Ammán hasta Petra por el Camino de los Reyes. Un trayecto de más de 5000 años de antigüedad, convertido en pavimento por deseo del emperador Trajano, que ahora es una muy buena carretera de varios carriles por sentido que sigue creciendo y ampliando sobre su trazado original.



Jerash (Gerasa) está a 42 Km al norte de Ammán y es una de las ciudades romanas mejor conservadas y más espectaculares de Oriente Próximo, siendo comparadas por muchos con la "Ciudad antigua de Éfeso" en Turquía y con frecuencia llamada "la Pompeya de Asia". Su mayor esplendor fue en el siglo II cuando alcanzó entre 20 y 25 mil habitantes. Aún se está descubriendo desde 1806 y su restauración comenzó hace relativamente poco, en 1925.

Te llamarán la atención el Templo de Artemisa, la Plaza Oval, o los Teatros y verás preciosas avenidas como el Cardus máximus y Decumanus Norte y Sur e impresionantes monumentos como Ninfeo, Ágora, Odeón, el Templo de Zeus o los Propileos. Algunas zonas me recuerdan las "Ruinas de Volubilis", la ciudad romana próxima a Meknes en el norte de Marruecos.
Pero, sin lugar a dudas, los dos enclaves que más llamaron mi atención, fueron el Arco de Adriano que manifiesta con claridad la pompa y el esplendor del imperio romano con sus 13 metros de altura, y desde luego el Templo de Artemisa, la diosa de la caza y la fertilidad e hija de Zeus y Leto. De sus 12 columnas corintias, 11 siguen en pie delicadamente talladas desafiando al cielo.

Aquí te dejo algunas fotografías más: "Jerash con mi Nikon D850"
De camino a Jerash, es obligatoria la parada en Qalaat ar-Rabadh (el castillo de Ajlun), una fortaleza ayubí del siglo XII situada en la cima de una colina junto al pueblo de Ajlun que está bien conservada y permite hacernos una idea de como eran las construcciones militares islámicas. Una de sus curiosidades es que el foso seco de 15 metros de profundidad que lo protege está excavado en la roca.

Dentro hay un buen número de estancias muy bien conservadas y desde su terraza siempre llena de visitantes, se puede ver una buena panorámica del los tres ríos que bañan el Valle del Jordán. El castillo servía de baliza y enlace entre Damasco y El Cairo utilizando palomas mensajeras que recorrían esa distancia en un solo día.

Para acceder hay que subir una empinada cuesta de unos tres kilómetros desde el pueblo y los vehículos o autocares se quedan en el centro de visitantes y la taquilla que está a 500 metros. A mitad de camino en lugar estratégico hay un pequeño puesto de té a la menta con algunas sillas a la sombra, que atienden dos hombres con atuendos típicos, donde podéis hacer una parada.


MONTE NEBO y MÁDABA


No tiene perdida porque junto al mirador hay una escultura de hierro en forma de cruz. Simboliza el sufrimiento y la muerte de Jesús en la cruz y la serpiente que Moises vio en el desierto. Desde allí se puede acceder a una modesta iglesia Conmemorativa de Moisés, del siglo VI que guarda algunos de los mejor conservados mosaicos del país desde el año 530. Escenas de caza, fauna y otras en un pequeño museo donde se explica la historia del lugar.

Un buen número de personas de todo el mundo que se acercan al Monte Nebo, no lo hacen movidos por la cultura sino por su religión. Para los cristianos, esta región inspira su fe. Éste es el lugar en el que Dios se comunicó con el hombre por primera vez. Es la Tierra Santa en la que Dios entregó los Diez Mandamientos a Moisés, donde Job sufrió y fue recompensado por su fe, donde Jesús fue bautizado por Juan y donde Jacob luchó contra el ángel de Dios. Cada uno tienes sus motivo y razones para el recuerdo de estos rincones de nuestros "7 días en Jordania".


Una ciudad amable y tolerante donde los musulmanes llaman a la oración antes del amanecer y las campanas a los cristianos con el primer rayo de sol. Aquí nos compramos un pañuelo jordano después de regatear un buen rato con un simpático comerciante que nos lo colocó al modo tradicional. La ciudad tiene varios puntos de interés en el barrio antiguo, pero no tuvimos tiempo nada más que para la Iglesia de San Jorge.

En el exterior hay otros dos enormes mapas para que los guías puedan igualmente instruir sobre su pasado, pero no cuentan con aire acondicionado y medios como el del interior. Ya en el interior se puede observar perfectamente el oficialmente el mapa más antiguo de Tierra Santa, que fue descubierto en 1894 cuando se reconstruía la Iglesia de San Jorge.

Ya en la carretera a las afueras de Mádaba paramos en una fábrica de mosaicos donde personas con alguna discapacidad elaboran obras de un gran valor. Después de un rato observando las explicaciones que ellos mismos dan sobre sus trabajos y las preciosas obras que realizan, continuamos nuestro viaje con destino Petra. Aún nos quedaban algunas sorpresas para completar la jornada.


Llegamos a una hora en la que el sol pegaba de lleno, así que sombrero, agua y buen protector solar para subir hasta arriba. Nos marcamos un tiempo concreto para la visita, ya que al final de la tarde queríamos visitar la pequeña Petra y dejar así el día siguiente completo para la mayor. Una hora en subir y bajar, visitando un buen número de pasillos y estancias muchas de ellas semiderruidas aunque su construcción es imponente.

Antes de entrar al castillo hay una pequeña iglesia reconstruida. La construcción es enorme y son muchos los distintos espacios a recorrer. Incluso tiene algún pasadizo visitable que ni intentamos encontrar ya que no teníamos ni linterna ni tiempo. El castillo tiene varias torres de vigilancia, un enorme patio, una iglesia interior, una zona de mercado y una prisión. Durante la bajada vimos algunas lápidas y tumbas al borde del camino.


amiga Ilu nos advirtió de lo interesante que era visitar
Siq Al Barid (Cañón frio) es un sendero bien marcado de unos 400 metros de longitud y varios tramos anchos y llanos en los que se observan algún templo y los triclinios o espacios ganados a la roca que probablemente se utilizaron de comedores para los mercaderes y viajeros. Hay que hacer varias paradas sin falta, una de ellas en la casa pintada a la que se accede por unos escalones y donde se pueden observar frescos en los techos como raros ejemplos de pintura nabatea.

Al final el cañón se estrecha tanto que dificulta el paso de una persona y hay unos escalones a los que se accede con mucha dificultad y un cartel a modo de reto que dice "Las mejores vistas del mundo". Son muy pocas personas las que acceden a él y nosotros cumplimos el reto. El final se puede ver en un vídeo aquí.



La mayoría de alojamientos próximos a Petra están en la ciudad próxima de Wadi Musa. Nosotros pasamos dos noches en el Hotel Petra Panorama, que está construido a las afueras en una ladera y tiene unas vistas privilegiadas sobre las montañas de Áqaba y el valle de Petra con unos amaneceres y atardeceres de impresión.

En el Centro de Visitantes podéis haceros con un mapa gratuito con una breve historia de la ciudad antigua de Petra en español y comprar vuestras entradas. A partir de ahí tres kilómetros al corazón de la ciudad. Nosotros recorrimos completo el sendero principal con los lugares más significativos, parando a comer un picnic en uno de los varios restaurantes de su interior. Puedes elegir el modo en que recorres Petra y puedes hacerlo por tramos en caballo, calesa, camello o a pie, esta última opción es la más económica, la más cansada y la que nosotros elegimos.


Algunos recuerdos han vuelto conmigo y en este lugar, al igual que hice en Las Ruinas de Troya, pude comprar un libro con historia. En una de las cuevas que los beduinos ocupan como pequeñas

Aquel hombre resultó ser el hijo del matrimonio de la autora con un beduino que conoció durante su visita a Petra y motivo del libro. El precio era similar a lo que aquí puede costar, lo diferente es no solo el lugar o la historia, sino que Raami el hijo de la autora tuvo a bien dedicármelo.
"Indiana Jones y la última cruzada", una de las películas más taquilleras de Spielberg, rodada allí, no le hace gala. La realidad supera la ficción y Petra ha sido sin duda uno de los puntos fuertes de nuestro viaje y merece un capítulo aparte con más detalle para que puedas ver sus maravillas y tener referencias si decidís viajar a Jordania y visitar la ciudad rosa.
Aquí os dejo una pequeña guía con fotografías y referencias de la mayoría de lugares que visitamos en la ciudad rosa de "Petra":

"Guía de Petra" (en construcción)
* Bab Al Siq
* Siq - El desfiladero
* Al Khazneh - El Tesoro
* El Teatro
* Las Tumbas Reales
* Tumba de la Urna
* El Ninfeo
* El Gran Templo
* Qasr Al-Bint
* Ad Deir - El Monasterio

Javi, David, Merche y yo en Mádaba Jordania, donde compramos de recuerdo sendos pañuelos jordanos.
Continúa el viaje por Jordania aquí: 7 días en Jordania - II (en construcción)
