El fracaso empresarial es una realidad. Muchos empresarios han fracasado en el pasado, y la triste verdad es que muchos más los seguirán en el futuro. Si está leyendo este artículo, lo más probable es que en este momento de su vida, usted esté buscando desesperadamente algunas estrategias para ayudar a impulsar a su empresa hacia adelante, y si esto es así, acá encontrará una valiosa información que sin ninguna duda le será de utilidad.
Cuando nos enfrentamos a la posibilidad real de fracasar, es muy tentador rendirse. Los días en que se siente el fracaso como algo cercano, son los que pondrán a prueba la fortaleza de su estrategia de negocios. Rendirse es muy fácil. Resistir es el verdadero desafío.
Pero antes de renunciar a su empresa o de abandonar su negocio, tenga muy en cuenta los siguientes consejos.
1. Identifique qué es lo que está saliendo mal
Muchos propietarios de negocios buscan la opinión positiva de los clientes, pero pocas veces se fijan en realidad en los comentarios negativos. Cuando se aprende a escuchar sobre todo de aquellas cosas que no nos gusta escuchar, es cuando podemos comenzar a ver la manera de solucionar todo aquello que nos impide avanzar.
2. Sea objetivo
Los dueños de negocios a menudo son incapaces de separarse de sus propias empresas. Cuando no se hace ese movimiento, nos es imposible pensar como piensan los clientes y de esta manera se hace muy difícil ofrecerle a la gente, aquello que están buscando.
Muchas empresas fracasan por culpa de sus propietarios. Usted no puede permitirse el lujo de gastarse todas las ganancias simplemente porque su nombre figura en los papeles de la empresa. Ajuste siempre su salario, y manténgalo acorde al salario de sus empleados. Algo tan simple y sencillo como esto, mantendrá a su empresa a salvo.
3. Si no sabe, pregunte
Usted debe estar dispuesto a hacer preguntas. Si hay algo sobre lo que usted no sepa lo suficiente y que esté relacionado con su negocio, entonces no lo piense dos veces y busqué el consejo de un colega más experimentado que usted. Si lo hace, esta relación que surgirá con ese colega, con el tiempo los beneficiará a los dos.
Usted no es una isla, y no puede creer que tiene todo el conocimiento que se necesita en los negocios. De hecho, usted debe saber muy bien, que ni siquiera conoce absolutamente todo acerca de su empresa. Ábrase a las nuevas ideas. Sus ideas pueden ser muy buenas, pero no son la única manera de lograr el éxito. Es probable que al compartir sus ideas con otras personas con más experiencia que usted, descubra que sus ideas brillantes no siempre funcionan en el mundo real.
Y si usted ya sabe demasiado acerca de su negocio, entonces no se relaje cuando esté muy adelantado o dominando su mercado. Ese es el momento de comenzar a empujar aún más fuerte.
4. Invierta en su equipo de trabajo
La gente que trabaja con usted y para usted, debe ser vista como su mayor activo y deben sentirse parte de la empresa. Un empleado que solamente trabaja por su sueldo, nunca será bueno para ningún negocio.
Nada hace crecer más un negocio, que el tener un equipo de trabajo comprometido donde sus miembros se dediquen por completo a alcanzar el éxito. Usted debe buscar la manera de que sus empleados se comprometan de verdad con su empresa, eso hará que tanto ellos como usted, puedan crecer.
5. Piense siempre en sus clientes
No venda lo que a usted le apetece vender, venda lo que sus clientes quieren comprar. Recuerde que su negocio existe para ofrecer servicios que resuenan con lo que sus clientes buscan. La demanda y la oferta siguen siendo la base de la economía. La supervivencia y el crecimiento de su negocio, dependerá siempre de lo bien que usted conoce a sus clientes y de su capacidad para satisfacer sus necesidades.
Haga de la satisfacción de sus clientes una prioridad clave. Invierta dinero en hacer estudios de mercado amplios y exhaustivos. Pregunte siempre a sus clientes acerca de lo que ellos quieren y esperan recibir de su negocio. Cuando tenga esa información, llévela a la realidad en su empresa y dele a sus clientes lo que ellos esperan recibir de su parte.
Su negocio no sobrevivirá únicamente con los clientes existentes. Para aumentar sus ingresos y poder crecer, necesita agregar nuevos clientes cada día y eso se consigue cuando los clientes perciben que en realidad hay alguien que se interesa por ellos más que por su dinero.
6. Vuelva a la mesa de dibujo
Vuelva siempre a la mesa de dibujo, vuelva siempre a la raíz de los problemas. Si las cosas no funcionan como usted lo espera, entonces comience a hacerse preguntas. ¿Está pagando más en salarios de lo que sus ingresos pueden soportar? ¿Necesita despedir personal, hacer ajustes a los paquetes de compensación o considerar otras medidas de reducción de costos? ¿Sus ventas disminuyen y usted aún no tiene claro el por qué?, etc.
Hágase todas las preguntas que sean necesarias y redefina permanentemente su propuesta de valor. Establezca cuidadosamente nuevas metas que sean claras, definidas y específicas, y trabaje solamente con unas pocas de ellas, ya que perseguir demasiados objetivos no siempre ayuda a enderezar el barco.
Investigue si su gobierno o la industria local apoya iniciativas como las de su empresa. Si es así, usted puede acceder a conseguir subsidios a través de diversos programas de desarrollo empresarial y a veces, esto puede mejorar notablemente la situación de cualquier compañía.
7. Tenga siempre un plan para sus activos
Si su negocio fracasa hoy, los activos de su empresa pueden ser su único consuelo. Los activos están destinados a rendir dinero para su negocio, y eso no debería cambiar en medio de circunstancias extremas. Si bien pueda ser que usted ya no pueda operar directamente sus propios activos, otras personas pueden operarlos por usted y a cambio de eso, usted puede seguir recibiendo dinero. Y ese dinero puede ser la cuerda de salvamento que necesita para mantenerse a flote.
Usted puede alquilar los edificios y la maquinaria básica por un precio atractivo. Cuando las cosas se ponen difíciles, siempre aparecerá la tentación de vender, pero no tome esta decisión como una reacción instintiva, ya que puede salirle muy costoso.
Si usted mantiene la cabeza fría, podrá llegar a términos de negociación aceptables, que le permitirán arrendar su empresa a terceros que quieran darle un nuevo aire. A futuro es posible que esos terceros decidan comprar todo. Si esto es así, es porque las cosas para ellos están marchando bien, luego considere siempre la posibilidad de conservar al menos algunos pequeños derechos de propiedad sobre su empresa.
Mantenerse a flote en el mundo de los negocios es muchas veces un asunto de sentido común y de aprender a interpretar todas las señales que se reciben, tanto desde el interior de la empresa, como desde los clientes a los cuales se busca prestarles un servicio. Mantenga sus ojos bien abiertos y dispóngase siempre a cambiar cuando sea necesario. Nada es estático, todo está siempre en movimiento y el mundo de los negocios no es la excepción.