Siempre he escuchado que la piel grasa envejece más tarde al estar siempre hidratada por la grasa que generan sus glándulas sebáceas.
Aunque se podría decir que ésta es una de las pocas ventajas que tiene, la verdad es que el exceso de sebo no garantiza que la piel esté siempre hidratada y no necesite productos específicos que la hidraten. Una piel puede ser grasa y estar deshidratada.
Además, el problema de la piel grasa también suele ir acompañado de poros dilatados, espinillas y puntos negros y, por ello, paara mejorar su apariencia y controlar sus síntomas conviene tener en cuenta algunos consejos como los que nos da la firma española Sileä nos da.
1. Lo más importante. Si tu piel sufre acné, consulta antes de usar cualquier producto cosmético con tu dermatólogo, él mejor que nadie sabe lo que tu piel necesita tras elaborar un diagnóstico sobre la misma.
2. Duerme las horas que necesites, es primordial descansar bien para lucir una piel saludable y con más brillo.
3. La limpieza tanto por la mañana como por la noche es fundamental pero en la piel grasa aún lo es más.
Para ello conviene utilizar algún producto específico para este tipo de pieles, a ser posible con movimientos circulares y mucha hidratación, también a la hora de aclarar.
Se recomienda no usar jabón, ya que puede resecar aún más nuestra piel (yo suelo usar aguas micelares de marcas como Bioderma, Eucerin o Garnier).
4. Tras la limpieza, un tónico astringente para intentar reducir el exceso de grasa, así como para evitar que se formen poros y otras impurezas.
5. Hacer uso habitualmente de las mascarillas, siempre sobre la piel limpia y sin llegar a la media hora tras su aplicación.
También algún peeling de vez en cuando, como manera más sencilla de eliminar células muertas.
6. Cuida tu alimentación, optando por las frutas, verduras, carnes bajas en grasa (a ser posible
blancas como el pollo o el pavo) y mucha fibra. Nada de alimentos a base de azúcar refinada, alcohol o carnes rojas.7. Hay que ser muy meticuloso con la higiene. Intenta no tocarte la cara con las manos sucias y tenerlas siempre limpias a la hora de aplicar cualquier crema, loción o tónico.
Tampoco te toques los granitos si no quieres provocar una inflamación y posterior infección o aparición de impurezas (ésé que es difícil pero hay que evitarlo a toda costa).
8. Practica ejercicio siempre que puedas, está demostrada su importancia para la piel, sobre todo el aeróbico, pues el sudor ayuda a eliminar toxinas y mantenerse en un peso saludable, siempre es positivo para su elasticidad y tersura.
¿Qué os parecen estos consejos?