8 cosas que hago solo en mi imaginación

Muchas veces escribo posts sobre esos momentos difíciles de tener niños en casa, como darse una ducha, o tener 5 minutos, o ver una serie en condiciones; pero cuando leí el post de papa en prácticas sobre qué echaba de menos de su vida antes de ser papá, y después leí el de y, además, mamá donde resumía lo peor de la maternidad….no pude evitarlo, tuve que sentarme a hacer una lista.

Me encantan las listas, así que no era ningún sacrificio. Pero tenía que sentarme a hacer una lista de las 8 cosas que más echo de menos, y que me resultan más difíciles de la vida de madre. ¿Por qué 8? Porque me gusta ese número, y porque si me dejo ir igual hago una lista de 30 jejejejeje.

Me ha costado un poco decidirme por las 8 ganadoras, porque hace meses que empecé la lista, y es que elegir no es lo mío, pero aquí van:

Las 8 cosas que más echo de menos.

Las he puesto sin orden de prioridad, porque si entramos en el orden publico el año que viene.

1 – Jugar a fútbol

2 – Disfrutar una comida. O almenos terminar una comida sin tener que levantarme 20 veces: ya sea un desayuno, una comida, una cena, ¡o una merienda!

3 – Esas quedadas sin programar: para un café, unas bravas, unas cervezas. Poder quedar con alguien sin tener que organizar 80 cosas antes.

4 – Una ducha laaarga y con la música a tope.

5 – Estirarme en el cesped o en la playa, a tostarme al sol y mirar las nubes,  y olvidarme de lo que tenía en mente.

6 – Las tardes de sofa y peli. Y de no hacer nada.

7 – Las largas conversaciones: de sobremesa, de madrugada, en el café, con la cerveza; esas conversaciones que se producen en el momento más inesperado, y que duran horas.

8 – Esas mañanas en que se te pegaban las sábanas…sola o en compañía.

imagen de internet

Gracias a esos dos blogs geniales por inspirarme a hacer esta lista.

¿coincidís conmigo en alguna de las cosas que echo de menos? ¿me he olvidado algo?

Eso sí, a pesar de todas estas cosas, no cambiaría por nada ser la mamá de las dos pequeñas terremoto.

En un par de días os cuento por qué…