A-cero presenta una propuesta de Centro Comercial en el Puerto de Valencia

El estudio de arquitectura A-cero, dirigido por Joaquín Torres & Rafael Llamazares, presenta una propuesta realizada para la proyección de un centro comercial en el puerto de Valencia, para el que se plantean dos posibles opciones. Hoy os mostraremos la primera de ellas.

CROQUIS

ESTADO ACTUAL

SITUACIÓN

Esta propuesta plantea la creación de un espacio de un centro comercial en la antigua dársena del Puerto de Valencia, situada entre los muelles y la playa de la Mavarosa.

SECCIÓN TRANSVERSAL

PLANTA Y ALZADOS

En esta propuesta se estima una superficie de 12.200m2 de uso comercial donde se proyectan 72 locales comerciales, más un aparcamiento exterior y zonas de recreo y esparcimiento. Se proponen una serie de piezas comerciales dispuestas en dos bandas en el interior de los tinglados dando lugar a una calle interior de uso mixto: comercial y de restauración.

El  tinglado 4 cuenta con una superficie comercial de 6750m2 donde se plantean 40 locales comerciales. En el tinglado 5 se proyectan 32 locales en una superficie comercial de 5.450m2. Como podemos ver en la planta, de arriba a abajo la distribución quedaría de esta manera: paseo/puerto, piezas comerciales, calle comercial interior, tinglado piezas comerciales y acceso.

VISTA

La disposición del centro comercial en un único nivel no compite en altura con la arquitectura existente y permite preservar la percepción de los antiguos tinglados, tanto desde la calle interior, como desde el paseo marítimo y el puerto.

Se respeta la arquitectura de las naves existentes y los tinglados, preservando la estructura original de la dársena y las cubiertas de valor histórico. Se recubren las fachadas con paneles de cemento reforzado, aluminio y vidrio siguiendo un diseño ortogonal de líneas y ángulos rectos.

Se proyectan por tanto dos bandas con una serie de cajas acabadas en blanco, con volúmenes que se proyectan sobre los paneles de vidrio que forman los escaparates. Sobre estos se observan las cubiertas originales de los tinglados, logrando una integración de ambas arquitecturas en en entorno.

En el interior se proyectan las fachadas exteriores, creando pabellones respetuosos con la arquitectura original.