Mientras la deuda española se acerca a los niveles de basura y los ciudadanos estamos ahogados con las excesivas alzas de impuestos, rebajas de sueldos, menos servicios, copagos y alzas de precios de servicios básicos gracias al IVA del 21%, la Casta que nos rige y expolia aún no ha renunciado a ninguno de los privilegios que mantiene y detenta, en lo que parece una burla de quienes ley tras ley meten su mano más y más en la cartera de los ciudadanos.
Hace pocos días nos enteramos que el Congreso de los Diputados ha aprobado su presupuesto para 2013. 84 millones de euros gastarán sus señorías durante el próximo año. Dentro de esta enorme cantidad de dinero llaman la atención algunas partidas que en absoluto son necesarias para el buen funcionamiento de esta institución.
Es destacable que a pesar de la que nos está cayendo, y de la necesidad de tomar medidas ejemplares y simbólicas por parte de nuestra casta privilegiada, seguiremos pagando durante 2013 teléfonos móviles de última generación con barra libre de voz y datos para cada diputado, Tablet conectado a Internet también para cada uno, ordenador conectado a Internet tanto en el despacho como en el escaño (¿Para qué quieren internet en los escaños?) y por supuesto, conexión ADSL en las casas particulares de sus señorías.
Tampoco hay cambios en las "indemnizaciones" mensuales que los sinvergüenzas que teniendo casa en Madrid, cobran para gastos de alojamiento y manutención en Madrid.
Pero el presupuesto 2013 trae algunas sorpresas muy desagradables para los ciudadanos. Para viajes de sus señorías, avión o Renfe, se disponen 6.750.000 euros, que pagaremos entre todos los ciudadanos. Si viajan en su coche particular, se les pagará 0,25 por kilómetro recorrido. Al igual que este año, y anteriores, los diputados dispondrán de una tarjeta para taxis con un total para cada uno de unos 2.500 euros. Por supuesto que los partidos extienden sus garras hasta el Congreso, habrá en 2013 casi 10 millones de euros para repartirse entre los diferentes grupos políticos.
Para sorpresa de los lectores, hay dos nuevas partidas que no existían en años anteriores: Una partida de 7.000 euros para multas de tráfico de sus coches oficiales y otra partida, 30 mil euros, para pagar los costes de parking de sus señorías en el Aeropuerto de Barajas.
Y la guinda del pastel: Una subvención de casi un millón de euros a la Cafetería del Congreso para que los diputados puedan comer y beber más barato que lo que deben pagar los escolares que llevan sus taper con comida de casa al cole.
No nos merecemos esta casta, bien calificada por César Molinas como la "Élite Extractiva".