El artículo ¿A qué libro le cambiaríais el final? | Pregunta de la Semana es propiedad de Carmelo Beltrán.
Como cada domingo, ha llegado la hora de la pregunta de la semana. Así, ya estoy otra vez por aquí dispuesto a interrogaros sobre cuestiones literarias. En esta ocasión mi duda es: ¿a qué libro le cambiaríais el final?
¿A qué libro le cambiaríais el final?
No creáis que me ha sido fácil llegar a una respuesta. Para nada. He tenido que rebuscar en años y años de lector de Goodreads para encontrar una adecuada. ¡Pero al final lo he conseguido!
Supongo que mi tardía se debe a que respeto de sobremanera el final que dan los autores. Creo que si han colocado dicho cierre es porque tenía un objetivo o mensaje para él. En algunas ocasiones será mejor y en otras peor, pero lo que está claro es que era hacia dónde apuntaban.
Así, mi elección ha sido La ladrona de libros de Markus Zusak. En el vídeo os explico bien mis motivos. Digamos que no estoy de acuerdo con el desenlace que tiene. Me hubiera gustado algo mucho más impactante.
Como curiosidad, esta fue la primera novela que reseñé en Bloggerizados. Qué tiempos.
Ahora os toca a vosotros. ¿A qué libro le cambiaríais el final? ¿Por qué lo haríais? ¿Cuáles son los motivos que subyacen a dicha decisión?
¿Quieres participar en la próxima pregunta de la semana?
No quiero irme sin contaros lo de siempre. ¡Sois vosotros los que hacéis la pregunta de la semana! Podéis dejar en los comentarios de este artículo o en el canal vuestras propuestas y saldrán en futuras ediciones.
En esta ocasión, por ejemplo, la pregunta ha sido propuesta por Detrás del YouTuber. Un seguidor y youtuber que os animo a tener en cuenta. Para ello, simplemente dejó la cuestión sobre a qué libro le cambiaríais el final en lo comentarios. ¡Y aquí está!
Nosotros nos vemos mañana con un nuevo artículo. La semana que viene llega cargada de sorpresas y nuevos formatos. Así, nos vemos por las redes. Por tanto, no os perderé de vista.
El artículo ¿A qué libro le cambiaríais el final? | Pregunta de la Semana es propiedad de Carmelo Beltrán.