Si bien la nueva edición y traducción de la novela ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? por parte de Cátedra y a cargo de Julián Díez es notable y muy valiosa -cabe destacar, además de la correcta introducción a la obra, la treintena de notas a pie de página que ayudan a entender y captar la riqueza oculta de la novela-, no he podido contenerme a escribir este post a vueltas con la traducción de la palabra "kipple" que aparece en esta novela.
La palabra kipple es un neologismo inventado por el propio Philip K. Dick -algunos biógrafos afirman que era un término hasta cierto punto común en el entorno de Berkeley en el que se movía el autor durante 1966- y que viene a significar "entropía doméstica" (para más información, el artículo Have You Ever Kippled? de David Langford).
Este vocablo aparece por primera vez en la novela ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? y posteriormente en el relato Laberinto de muerte.
El personaje de J.R. Isidore se refiere a ella en alusión al desorden y al caos doméstico que se genera en los apartamentos abandonados. Las cosas que la gente no pudo llevarse consigo cuando emigró a toda prisa hacia las colonias.
Si bien lo correcto hubiera sido, en mi opinión, no traducir el término al tratarse de una palabra inventada y personal del propio Dick, muy al contrario Julián Díez y Miguel Antón, traductores del autor californiano, sí se atrevieron con estos resultados:
El texto original de Philip K. Dick:
Kipple is useless objects, like junk mail or match folders after you use the last match or gum wrappers or yesterday's homeopape. When nobody's around, kipple reproduces itself. For instance, if you go to bed leaving any kipple around your apartment, when you wake up the next morning there's twice as much of it. It always gets more and more. [...] The entire universe is moving toward a final state of total, absolute kippleization.
Traducción de Julián Díez (Cátedra, 2015):
La morralla son las cosas inútiles, como el correo comercial, o las cajas de cerillas después de que uses la última, o el homeoperiódico de ayer. Cuando nadie la ve, la morralla se reproduce. Por ejemplo, si te vas a dormir dejando morralla en tu apartamento, cuando te despiertas a la mañana siguiente hay el doble. Siempre hay más y más. [...] El universo en su conjunto se mueve hacia un estado final de total, absoluto amorrallamiento.
Traducción de Miguel Antón Rodríguez (Booket, 2012):
La basugre son objetos inútiles, como el correo comercial o las cajas de cerillas cuando has prendido la última, los envoltorios de chicle o la prensa del día anterior. Cuando no hay nadie, la basugre se reproduce a sí misma. Por ejemplo, si se va a la cama dejando basugre alrededor del apartamento, al despertar a la mañana siguiente encontrará el doble de ella. Siempre hay más y más. [...] El universo se mueve hacia un estado último de absoluta basugrización.
Traducción de César Terrón (Edhasa Nebulae, 1982):
Kippel son los objetos inútiles, las cartas de propaganda, las cajas de cerillas después de que se ha gastado la última, el envoltorio del periódico del día anterior. Cuando no hay gente, el kippel se reproduce. Por ejemplo, si se va usted a la cama y deja un poco de kippel en la casa, cuando se despierta a la mañana siguiente hay dos veces más. Cada vez hay más. [...] Todo el universo avanza hacia una fase final de absoluta kippelización.
Personalmente encuentro que tanto "amorrallamiento" como "basugrización" me chirrían a más no poder.
Parece que César Terrón -a pesar de escribir mal el término: "kippel" en vez de "kipple"- acertó al no traducirlo.
Alabado sea el Wub.